Para empezar, prueba de fuego este Viernes Santo contra el Almería en el Estadio Castalia a partir de las 21.00 horas. El aliento de la grada será crucial
El Castellón está destinado a tener que sufrir hasta el último partido en Segunda División. A falta de cinco jornadas para finalizar la competición liguera (21 puntos), el equipo de la capital de la Plana afronta esta recta final con cuatro puntos por encima de las plazas de descenso a Primera Federación.
El Estadio Castalia será clave porque por el feudo 'orellut' tienen que pasar rivales directos que también luchan por no bajar de categoría. Para empezar, este Viernes Santo a las 21.00 horas llegará al feudo castellonense un Almería que pelea por el ascenso de categoría, pero al que el Castellón ya ganó en el partido de la primera vuelta en el feudo almeriense por un rotundo 2-5.
La escuadra castellonense vuelve al trabajo este martes por la tarde. Se entrenará sin solución de continuidad hasta el día del partido. El técnico Johan Platt buscará presentar el mejor once porque ese encuentro es lo más parecido a una final.
Un papel fundamental tendrá la afición albinegra que tiene previsto hacer un recibimiento espectacular a los jugadores cuando estos accedan al Estadio Castalia hora y media antes de que tenga que arrancar el duelo Castellón-Almería.