Andrés Querol/Vicente Pla/Castellón Información
Es una perogrullada decir que el mejor activo de un equipo son sus jugadoras, quizás por ello desde esta ventana hemos ido presentando a algunos valores del equipo de División de Honor Plata del balonmano femenino, jugado por mujeres, del Club Deportivo Balonmano Castellón.
En esta ocasión nuestra interlocutora es Raquel Romero a la que pedimos nos cuente como llega al balonmano y al Balonmano Castellón: “Tuve en un principio algunos contactos con el baloncesto debido a mi estatura pero no me terminó de gustar. MI hermana Elena jugaba a balonmano y tuve la oportunidad de probar, me gustó y me quedé”.
Creemos que el ser la ‘hermana de’ no ha influido en el desarrollo como jugadora de Raquel, aunque reconoce que “en ocasiones y sobre todo en los entrenamientos lo piques parece que se llevan a un nivel diferente como les puede ocurrir a Noelia y Alba Sales, pero de ellos siempre se sacan conclusiones positivas”.
Raque Romero tiene veintitrés años, jugadora joven pero con las ideas muy claras, su objetivo principal es apuntalar su futuro profesional y a ello dedica más tiempo del que tiene, pero su pasión y a la vez válvula de escape lo encuentra en el deporte, en el balonmano y en una posición específica de mucho esfuerzo y poca recompensa: “El juego en el pivote no es nada fácil, sabes que tienes que jugar para el equipo y no puedes permitirte ser egoísta, es una faceta que quizás la mayoría del público que asiste a los partidos no aprecia pero quienes estamos atacando en los seis metros, sabemos cuál es nuestra misión y somos conscientes que la lucha en la línea es, en muchas ocasiones, decisoria para que las compañeras logren el gol”.
De todas formas a la jugadora le resulta más cómodo y le gusta más defender que atacar y esto es lo que aprecia su entrenador Vicent Sos que la define como “pivote y central defensiva. Se encuentra muy cómoda en la línea de los seis metros y es un complemento perfecto para cualquier esquema defensivo”.
En tiende la jugadora que su concepto, correcto y generoso, no es habitual pero ella intenta inculcar sus valores a sus discípulos, cree que en todos los juegos y deportes de asociación, lo son en sí, porque tan importante debe sr quien logra anotar, como quien ha propiciado que esta situación se haya convertido en realidad.
De nuestra charla hemos sacado conclusiones, algunas nos las han contado, otras ha dejado que las confirmemos, seguramente algo se habrá guardado pero nosotros hemos conocido a una joven de veintitrés años con las ideas muy claras, tanto en lo personal como en lo deportivo, hemos intuido a una mujer son su capacidad de sacrificio importante: “Ojala el día tuviera treinta y seis horas”.
Resumiendo, hemos conocido a una mujer a la que le gusta el balonmano y el Club Deportivo Balonmano Castellón, una jugadora que, con sus compañeras, va por el camino más difícil y tortuoso, a una joven que prepara su futuro sin importarle el sacrificio, eso sí , siempre con la sonrisa e incluso la risa si la ocasión se merece.
¿Tendrá algo que ver el deporte y el grupo?