Este mediodía arribaba a Castellón la réplica de la Nao Santa María, que ha reproducido fielmente uno de los tres barcos con los que Colón descubrió América en 1492. Construida en Huelva, con motivo del 525 aniversario del ‘Encuentro entre dos mundos’, la nave reproduce fielmente el original en cuanto a su estética, e incorpora los elementos de seguridad modernos. Podrá ser visitada hasta el domingo y ¡Merece la pena!
Los marineros que hicieron famosas a las flotas de Europa se ponían tibios de alcohol a bordo porque escaseaba el agua dulce; y comían lo que podían, o lo que les dejaban, cocinado con agua salada y en las peores condiciones de almacenamiento. Las tripulaciones cristianas, conservaban la comida con los muertos, y las tripulaciones eran ‘cazadas’ en tierra sin ninguna consideración. La cara más bonita estará en Escala a Castelló donde la rica gastronomía del Grao es capaz de borrar esos malos recuerdos.