La institución destinará dos millones de euros a las labores de mantenimiento y conservación ordinaria de la red vial, y 3.160.000 a 11 actuaciones a mejora.
Durante el verano se extremará el control en las zonas más transitadas, ya que la limpieza de arcenes y caminos “mejora la visibilidad y previene incendios”.
El Plan establece cuatro líneas: mejorar la atención, implantar la administración electrónica, abundar en la interoperabilidad entre administraciones y eliminar trámites.