Los socialistas descartan recurrir el presupuesto de la institución provincial. Las tildan de "injustas" y lamentan "el abandono de la Diputación"
Clara Parra
El diputado provincial, Francisco Valverde, junto al edil de Hacienda en el Ayuntamiento de Vila-real, Javier Serralvo, han vuelto a analizar hoy las consecuencias que suponen para la ciudad y las entidades vinculadas a ellas el trato que perciben de la las cuentas de la Diputación provincial.
A juicio de los socialistas, existe una desproporción entre lo que aportan los ciudadanos de Vila-real y lo que posteriormente reciben. Según Serralvo, cada ciudadano de la localidad recibe 1,42 euros de la institución provincial mientras paga una media de 172,56 euros a través de impuestos como el IRPF o el IVA que llegan a la Diputación.
Pese a esta situación, los socialistas han anunciado que no recurrián los presupuestos, pese a no incorporar ninguna de sus peticiones, para “no entorpecer la financiación de los colectivos y entidades de la provincia que reciben apoyo”, han manifestado.
En concreto, los socialistas de Vila-real habían planteado la incorporación de inversiones en el municipio por valor de 3,2 millones de euros que se destinarían a proyectos como la construcción del aulario del colegio Carlos Sarthou, aportaciones culturales, para entidades o mejora de viales rurales. “Ni un euro destina la Diputación a Vila-real para que arregle caminos cuando el señor Folgado, responsable de esta área en la institución provincial, dedica 10 millones de euros a sufragar obras de estas características en otros municipios”, ha denunciado el edil Serralvo.
Capazos de billetes y calderilla
Según los socialistas, la aportación para 2015 de la Diputación a la ciudad será de 60.000 euros más dos aportaciones a entidades culturales. “El portavoz del PP de Vila-real y diputado de infraestructuras, Héctor Folgado, a la hora de repartir los recursos parece que tiene dos cestos. Uno lleno de billetes y otro con calderilla. Cuando reparte a los municipios del PP usa el primero y cuando se trata de financiar a entidades de Vila-real reparte la calderilla con el único objetivo de sacarse fotos”, han lamentado.