El último miércoles de abril se celebra el Día Internacional del Perro Guía, una fecha que sirve para recordar la invaluable contribución de estos animales a la vida de las personas ciegas. En España, la labor de la Fundación ONCE del Perro Guía es fundamental, facilitando la movilidad y la independencia a través del adiestramiento y la entrega de estos leales compañeros. Su existencia depende en gran medida de la compra de la Lotería ONCE, un acto de solidaridad que permite la continuidad de este crucial programa. La historia de Preston, un labrador negro, nos permite profundizar en la importancia de esta labor y en el compromiso de las asociaciones que trabajan para defender los derechos de los perros guía y sus usuarios.
Preston, como muchos otros perros guía, representa la culminación de un largo y complejo proceso. Su vida comenzó con una cuidadosa selección, un primer paso crucial para garantizar que posea las aptitudes necesarias para convertirse en un auxiliar de movilidad. Desde su nacimiento, su destino estaba ligado a esta vocación. Tras este proceso inicial, pasó un año fundamental con una familia educadora. Este período es crítico en su desarrollo, pues es aquí donde se sientan las bases de su socialización, obediencia y capacidad de respuesta a las necesidades de un futuro usuario. La interacción con la familia educadora forja un vínculo esencial, que luego se complementará con el entrenamiento especializado de la Fundación ONCE.
Durante dos años, la Fundación ONCE se encarga del adiestramiento riguroso de Preston y otros cachorros seleccionados. Este programa abarca un amplio espectro de habilidades, desde la obediencia básica hasta la navegación en entornos complejos y la respuesta a situaciones imprevistas. El objetivo final es que el perro se convierta en una extensión de los sentidos de su futuro usuario, proporcionándole seguridad y autonomía en su día a día. Una vez completado el adiestramiento, Preston, ya un perro guía completamente capacitado, es asignado a una persona ciega de la ONCE, marcando el inicio de una nueva etapa en la vida de ambos.
La Asociación de Usuarios de Perros Guía de la Comunidad Valenciana (Aspeguicv), fundada en 2012, juega un papel crucial en la defensa de los derechos y la imagen de los perros guía y sus usuarios. En sus casi 13 años de existencia, Aspeguicv ha llevado a cabo una incansable labor de concienciación y reivindicación. Sus campañas de sensibilización, que incluyen charlas en colegios, institutos y ayuntamientos, alcanzan anualmente a más de 3000 personas. Esta labor es fundamental para promover el respeto y la comprensión hacia los perros guía, asegurando su libre acceso a espacios públicos y eliminando cualquier obstáculo que pueda dificultar su trabajo.
La historia de Preston, por tanto, trasciende la anécdota individual para convertirse en un símbolo representativo del esfuerzo colectivo que permite la existencia y el éxito de los programas de perros guía en España. Su historia destaca la importancia de la solidaridad ciudadana, representada por la compra de la Lotería ONCE, la dedicación de las familias educadoras, la profesionalidad de la Fundación ONCE y el compromiso de asociaciones como Aspeguicv.
Todos ellos contribuyen a garantizar que personas ciegas puedan disfrutar de una mayor independencia y calidad de vida, gracias a la compañía incondicional y al apoyo inestimable de perros como Preston.
El Día Internacional del Perro Guía es una oportunidad para celebrar su labor y para reafirmar nuestro compromiso con su bienestar y el de sus usuarios. La lucha por sus derechos y la concienciación social son tareas esenciales que requieren un esfuerzo continuo y la colaboración de todos.