Los festeros alegan que los nuevos requisitos se comunicaron 4 días antes de la Magdalena cuando habían tenido 2 años para hacerlo
La mayor parte de las Gaiatas de Castelló que montaron carpa durante las fiestas de la Magdalena han comenzado a recibir notificaciones de multa por parte del Ayuntamiento, con importes de 750 euros. La razón de la sanción es que anclaron las instalaciones al suelo. Los presidentes afectados alegan que, después de dos años sin fiestas la autorización de ocupación de Vía pública con los nuevos requisitos llegó cuatro días antes de fiestas y era prácticamente imposible sujetar las carpas con contrapesos de varias toneladas. Han contratado un abogado para presentar los recursos.
Esperanza Molina/ Castellón Información
No han acabado los disgustos de las fiestas de la Magdalena de Castelló, al menos para muchas de las Gaiatas que montaron una carpa durante la semana grande. Desde el pasado viernes son ya 7 las asociaciones que han recibido una notificación de sanción por parte del Ayuntamiento de Castelló con multas que ascienden a 750 euros por Gaiata.
La razón que justifica esta multa, es que está prohibido agujerear el suelo para colocar los anclajes que aseguraron la seguridad de estas instalaciones durante las fiestas.
Según manifestaba el presidente de la Gaiata 13, Sensal, esta normativa es nueva de este año. Hasta el 2019, las gaiatas siempre habían anclado las carpas en el suelo. Pero parece ser que el Ayuntamiento ha modificado la normativa y ahora ya no permite hacerlo por el deterioro del pavimento.
Lo peor de todo, es que con dos años sin fiestas, la entidad municipal o el Patronato de Fiestas lo debería haber notificado con tiempo tanto a estas asociaciones culturales que con las gaiatas, como a otros colectivos festeros cuando requirió la documentación para la ocupación de vía pública. Pero no fue así.
Los gaiateros solicitaron con tiempo el permiso de Ocupación Pública, tal como se les exigía, pero el Ayuntamiento no les dio el permiso que necesitaban hasta cuatro días antes de empezar la Magdalena.
En ese permiso se incluía un párrafo, en negrita en el que se les indicaba la prohibición de anclar al suelo y se les exigía que utilizaran contrapesos para mantener la seguridad de las carpas sujetas al suelo.
“Con cuatro días esta exigencia era imposible de cumplir, señalaba el presidente de Sensal. Para ello había que encargar un estudio de ingeniería que calculara el número y peso de esos dispositivos, encontrar una empresa que los fabricara, contratar un camión para trasladarlos y una grúa pluma para poderlos depositar en los lugares que hubiera indicado ese estudio de ingeniería. Era materialmente imposible”.
Pero además, se da la circunstancia de que prácticamente todas las plazas de Castelló donde se han instalado esas carpas, están situadas sobre aparcamientos subterráneos. “llegamos a calcular que, por lo menos cada contrapeso debería ser de una tonelada, y podíamos necesitar más de 10. ¿Resistiría la superficie todo ese peso al haber un parking en el subsuelo? Eso más el peso de la carpa, el cálculo de las personas por aforo…”
Con cuatro días de antelación fue prácticamente inviable.
La sorpresa ha llegado con la notificación de las multas, porque, además, declaran los presidentes, no se tiene constancia oficial de la inspección realizada para la comprobación y realización de las denuncias. Nadie vino preguntando por nosotros ni se nos avisó de nada”.
En el caso concreto de la Gaiata 13, Sensal, la notificación de multa viene justificada con una inspección de comprobación que se había realizado el 24 de marzo, 3 días antes de que acabaran las fiestas.
Así las cosas, las Gaiatas afectadas por la sanción cuentan con el apoyo y la solidaridad de la Gestora de Gaiatas. Tienen 5 días para alegar y han contratado un abogado para que redacte el texto legal en su defensa.
Todas las sanciones realizadas van acompañadas del mismo texto, como si fueran fotocopias unos de otros. También las alegaciones presentarán la misma defensa, pero se presentarán por separado en nombre de cada Gaiata Afectada.
El presidente de la 13, Sensal, manifestaba que no hay falta de voluntad en cuanto al cumplimiento de las normativas, pero el ayuntamiento debería de haber comunicado estos requisitos sobre el anclaje con mayor antelación para haberlo podido cumplir. “Han tenido dos años y nos lo notifican con cuatro días de antelación sobre las fiestas, con todo contratado”.
El objetivo ahora será poder hablar con la entidad municipal con el objetivo de encontrar soluciones para los próximos años. La propuesta que defienden las Gaiatas es la de poder negociar un sistema de anclajes ‘fijo’, que se pueda tapar el mal efecto visual durante el resto del año, pero que sirva para poder sujetar estas instalaciones durante las fiestas. “Nosotros nos comprometemos incluso a pagar estos anclajes fijos y hacer frente al deterioro que se pudiera producir en el caso de la rotura de una baldosa, como ya hizo otra gaiata”.
Voluntad por parte de las Gaiatas, no falta. Ahora habrá que ver si el ayuntamiento y el Patronato de Fiestas también la tienen.
