La música forma parte de la cultura popular de toda la Comunitat Valenciana y, de manera especial, de nuestra provincia. Nuestros pueblos vibran con la música y la mayoría de nuestros municipios cuentan con su banda de música y su escuela de educando. La música forma parte de nuestra forma de ser, de sentir y de expresarnos. La música forma parte de nuestra cultura y la música es cultura. Y lo digo no solo como diputado, sino como músico y como alcalde de un pueblo, Sant Joan de Moró, que vibra con la música y que se vuelca con su banda.
Ahora el Consell que preside el socialista Ximo Puig pretende convertir en optativa la materia en tercero de la ESO y debilitar la presencia de la misma en la etapa del Bachillerato. Por eso, el Partido Popular de Castellón ejercerá de garante y defensa de la música como elemento obligatorio de la formación en Secundaria.
La provincia de Castellón es cuna de grandes músicos y su fuerza y su talento se exhibe en cada fiesta, en cada celebración, en cientos de conciertos. Somos herederos de una cultura que nos contagia, que nos acompaña desde bien pequeños y que cultivamos con devoción. Y por eso no entendemos que un valor que tanto nos suma y nos une pueda desaparecer de la formación académica como pretende el PSOE convirtiendo en optativa esta materia en la etapa de la ESO.
Desde el PPCS nos comprometemos a presentar iniciativas que frenen este desatino. Una medida que no solo ataca a la formación académica del individuo, sino que nos priva de una formación que desarrolla la sensibilidad, la expresión, la atención y es un acicate desde la más temprana edad para estimular los sentidos. La música es una materia a blindar, no a desmantelar. Hay que garantizar que la asignatura de música sea obligatoria en Secundaria y se refuerce su presencia en el Bachillerato.
Ese es nuestro compromiso con la música y con los músicos. Nuestra defensa de su trabajo, de su esfuerzo y su formación. De la actividad que desarrollan cientos de bandas de música y escuelas de educandos, del trabajo de los conservatorios y, por supuesto, de los profesores de música que en colegios e institutos transmiten a sus alumnos el amor hacia un arte que no podemos ni debemos desligar de ninguna forma de la formación del individuo. La música forma parte de nuestra forma de ser y sentir. La música forma parte de nuestra cultura. Y es cultura.
