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miércoles, 15 de mayo de 2024 | Última actualización: 00:03

PSPV, Compromís y CSenM se oponen a la libertad de elección de los padres en la educación de sus hijos

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La declaración institucional presentada por el Grupo Municipal Popular ha sido vetada por las agrupaciones del tripartito de Castellón 

Castellón Información 

La Junta de Portavoces reunida esta mañana en el Ayuntamiento de Castellón para tratar los temas del próximo pleno, ha tumbado, con los votos del tripartito (Psoe, Compromís y Castelló en moviment), la propuesta de declaración institucional que había presentado el Grupo Municipal Popular, en la que instaban al conseller de Educación, Vicent Marza, a reconsiderar su decreto sobre el plurilingüismo, que beneficia descaradamente a los alumnos de las líneas de valenciano sobre las líneas de castellano, lo que a juicio del grupo popular, supone una discriminación para los alumnos, al tiempo que coarta la libertad de los padres a elegir el idioma educativo de sus hijos.

Aunque el GMP podía esperarse el rechazo de los otros grupos, nadie le quita a su portavoz, Begoña Carrasco, el derecho al pataleo, y a expresar lo que siente su grupo, y con su grupo, muchos otros padres que se van a ver abocados al valenciano si o también.

La portavoz popular, Begoña Carrasco, ha manifestado que el decreto del plurilingüismo en los centros educativos no tiene en cuenta la libertad de los padres, que son quienes deben decidir la lengua en la que quieren que estudien sus hijos.

“El cambio del modelo lingüístico propuesto por Marzá produce una grave discriminación entre los niños. La propia denominación del modelo educativo tiene una evidente carga despectiva con el castellano hablante, de hecho los niños que opten por más horas en valenciano serán “niños avanzados y estudiarán en el nivel avanzado y los niños que opten por más horas en castellano, serán tan sólo “niños básicos” y estarán en el nivel básico”, asegura Carrasco.

Por eso, instan a la Conselleria a que cualquier modificación en la normativa lingüística trate por igual a niños de lengua materna valenciana y castellana, que se respete la libertad de los padres a elegir y que en ningún caso se penalice con la reducción de horas en inglés a aquellos que opten por un nivel u otro.

Respecto al inglés, “tan importante para que nuestros hijos sean competitivos” Carrasco dice que según el modelo de Marzá sólo obtendrán titulación en inglés quienes renuncien al nivel básico en castellano. Así lograrán sólo la titulación máxima en inglés quienes opten por el modelo en valenciano, que se le llama avanzado, -se obtienen los títulos en inglés A1, A2 y B1, en primaria, secundaria y bachillerato respectivamente-. Quienes opten por un nivel intermedio lograrán titulaciones en inglés A1 y A2, y quienes opten por un modelo con menos valenciano y más castellano lo excluyen de cualquier titulación en inglés.

“La discriminación es evidente; si eliges más valenciano obtendrás titulación en inglés y si eliges más asignaturas de castellano, al centro se le reducen las asignaturas en inglés a sólo dos y por tanto se les penalizará negándoles la titulación en inglés. Es una manera de imponer el valenciano a toda costa”.

Además, en el nuevo modelo lingüístico propuesto por el actual Consell, las familias quedan relegadas a un segundo plano, pierden por completo la capacidad decisoria que le otorgaba el decreto de plurilingüismo elaborado por el Partido Popular.