El colegio Blasco Ibáñez ofrece, durante el curso, un servicio a los padres que trabajan, para dejar a los pequeños temprano a ‘L’Aula Matinera’. Cruz Roja utiliza esta infraestructura para ofrecer el desayuno a más de 30 niños y niñas de diferentes zonas de la población.
“En un principio nos ayudaban las madres, cuenta Isabel, una de las voluntarias del proyecto, pero pronto conseguimos formar un grupito de voluntarias y ahora son los propios alumnos quienes nos ayudan, fomentando a la vez solidaridad, compañerismo y la responsabilidad de repartir entre todos la leche, cacao, cereales, zumos, galletas ó incluso bocadillos para el recreo”.
Pilar Moya, una voluntaria, maestra jubilada puso todo su empeño en sacar adelante este proyecto. Pilar tuvo noticias de que en determinadas familias, como consecuencia de la crisis, los niños no recibían los nutrientes adecuados para hacer frente a una jornada lectiva.
La iniciativa de Cruz Roja ya se ha hecho popular en La Vall, donde hay personas dispuestas a aportar alimentos para ofrecer a los niños y familias en situación de necesidad. Son personas en situación de necesidad que no dudan en solicitar la colaboración de Cruz Roja, para garantizar un desayuno saludable a los hijos.
Si bien en estos momentos es el colegio Blasco Ibáñez quien ofrece sus instalaciones del aula matinera para llevar a cabo esta iniciativa, no se descarta ampliarlo en lo sucesivo a otros centros de barrios distintos en La Vall d’ Uixò, población con más de 32.000 habitantes, en otros tiempos cuna del calzado y que hoy día también sufre los efectos de la crisis, como tantas otras.
