Noticias Castellón
viernes, 29 de marzo de 2024 | Última actualización: 13:47

En campaña

Tiempo de Lectura: 4 minutos, 5 segundos

Noticias Relacionadas

Jorge Fuentes. Embajador de España.

Estamos mediando la campaña más polémica de nuestra corta vida democrática ya que nace en la resaca de una moción de censura por primera vez triunfante gracias a la conjunción de golpistas, filoterroristas y comunistas con un socialismo desarticulado.

Los sanchistas podrían decir que se trata de un PSOE renovado, rejuvenecido, moderno. Para muchos españoles, sin embargo es inconcebible imaginar al partido sin el apoyo de González, de Guerra, Leguina, Corcuera y tantos otros que labraron un socialismo patriótico, estable y prestigiado internacionalmente. Un partido que solo está logrando crecer gracias al declive de Unidas Podemos (¡viva la gramática!) y que solo podra gobernar si reconstruye la alianza Frankenstein de la moción.

Es bueno que un país viva con pasión sus períodos electorales. A fin de cuentas son los momentos en que los ciudadanos podemos participar en la vida política con nuestro voto y nuestra opinión. Nunca ha sido ésta tan participativa como lo está siendo en estos dias y ello no solo porque los españoles intuimos que nos jugamos mucho sino tambien porque la ciudadania se ha implicado más en la cosa política a traves de las redes sociales sin duda más influyentes hoy que los medios informativos como son la radio, la televisión y la prensa de papel o digital.

Pocas instituciones van a salir indemnes de las próximas elecciones. La primera víctima será el CIS de Tezano que si repite el desacierto de las andaluzas, debería ir cerrando sus puertas. Mejor servidos estaríamos con encuestadores privados e independientes que con un centro oficial instaurado para servir al partido gobernante.

Mal parada está saliendo también la Junta Electoral Central (JEC) que quita y pone a su aire, descartando a Vox por no estar en el Parlamento (falso: cuenta con un simbólico senador), cuando en 2015 se aceptó en los debates a Ciudadanos y Podemos que no estaban en las Cortes y se excluyó a UPyD que si lo estaba.

Un cero también a la cadena estatal de RTVE de Rosa Mateo que mangonea de modo indecente los debates de la forma más conveniente para el Gobierno, evitando el 'cara a cara' tradicional y buscando incluir al máximo posible de participantes para confundir al personal con un 'totum revolutum'.

A Sánchez le salió mal, sin embargo, que la JEC excluyera a Vox de los dos debates ridículamente consecutivos ya que le habría encantado poder aunar a Casado y Abascal y quizá también a Rivera, en la más extrema de las derechas. No quiero ni pensar el efecto óptico que se produciría en ese debate inexistente, si PP y Vox hubieran aparecido emparejados en el ala derecha del escenario.

Y muchos ceros para los partidos que con el desmadre producido  tras meses de campaña, en realidad desde que se voto la moción de censura, han sido capaces todos ellos de meter docenas de patas, se han saltado las reglas del juego, especialmente el PSOE con sus numerosos decretos-ley propagandísticos, la selección de componentes de las listas electorales, con frecuencia disparatadas y con las declaraciones endebles de estos novatos de la política.

En una semana saldremos de dudas. No debemos tomar el proceso en broma. Hay que votar y hacerlo reflexivamente. Nos va en ello el futuro inmediato de España: su prosperidad, su estabilidad, su unidad, su prestigio. Nos va nuestro trabajo, nuestras pensiones, nuestro bienestar.

No me atrevo a predecir lo que va a ocurrir. Solo se vislumbran dos alternativas: o gana una coalición de izquierdas al estilo de la moción, o vencen las derechas al estilo andaluz pero con Vox incorporado al gobierno. Ir a una alianza de PSOE con Ciudadanos y Podemos, seria un tal desprestigio para el partido de Rivera que sufriría un gravísimo castigo del que difícilmente levantaría cabeza.

Aunque no sé lo que va a ocurrir, si sé lo que desearía que ocurriera. Quisiera un Gobierno capaz de crear puestos de trabajo, medio millón al año. Capaz de hacer frente al separatismo catalán peligrosamente contagiado al País Vasco, a la Comunidad Valenciana y a la Balear. Capaz de enfrentar con determinación el problema migratorio y tratar ,   sin demagogia los problemas de violencia de género, la pérdida de nuestro importante idioma y la despoblación de nuestro suelo.

No quisiera, por el contrario, ver la victoria de una coalición que situaría antes de mucho, el paro por encima del 20%, la prima de riesgo rondando los 100 puntos, la deuda externa al borde de la quiebra, la inversión exterior decayendo, en fin, una continuación del proceso que empezó hace nueve meses.