Guillermo Miró. Ingeniero Industrial.
Hola a todos. Esta semana tenemos una noticia para celebrar todos los castellonenses: a Avel·lí Corma, natural de Moncofa (nuestro químico más prestigioso actualmente) le ha sido otorgado el Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica de este año, junto con Mark E. Davis y Galen D. Stucky. Tres grandes de la ingeniería química galardonados este año. La semana que viene hablaremos un poco más de nuestro gran investigador, pero esta semana vamos a terminar con las señales que nos pueden ayudar a detectar cuando algo promete ser científico pero no lo es del todo, tal y como dejamos pendiente la semana pasada. Hay que estar atento si ocurre alguno de los siguientes escenarios:
*Muestreo no representativo: En algunos estudios con humanos, los investigadores tratan de hacer un muestreo seleccionando unos pocos individuos que sean representativos de una población mayor. En algunos casos donde la muestra seleccionada es distinta a la población en su conjunto, las conclusiones bien podrían no ser correctas.
*Ausencia de grupo de control: En la mayoría de ensayos es necesario un grupo de control ya que los resultados de los sujetos estudiados tienen que ser comparados con los de un «grupo referencia», elegido de manera aleatoria.
*Ausencia de doble ciego: Para evitar cualquier sesgo, los sujetos no deben saber si pertenecen al grupo de estudio o al grupo de control. En los estudios con «doble ciego», incluso los investigadores no saben qué sujetos pertenecen a cada grupo hasta después del estudio, aunque esto lleva aparejado algunos matices éticos.
*Resultados parciales: A veces, se seleccionan solo los resultados de los experimentos que secundan la conclusión de un estudio omitiendo los que no lo hacen. Si en el informe de una investigación se sacan únicamente conclusiones de una parte de los resultados, puede que sean parciales y seleccionados así intencionadamente.
*Resultados irreproducibles: Los resultados deben ser reproducibles en investigaciones independientes y comprobados -cuando sea posible- en un amplio número de situaciones para asegurarse de que pueden generalizarse.
*Publicaciones y referencias: Las investigaciones publicadas en revistas importantes han estado sometidas a un proceso de revisión, pero aun así pueden contener errores, de modo que deben evaluarse teniendo esto en cuenta. Del mismo modo, el hecho de contar con un gran número de referencias no siempre indica que la investigación esté fuertemente respaldada.
Resumiendo, durante la semana pasada y la actual hemos hablado de una serie de requisitos que como ciudadanos debemos de exigir a cualquier investigación científica, para poder aceptar el resultado de ella y no dejarnos engatusar por cualquier “experto” en la materia. Como siempre, comentarios abiertos para sugerencias, ideas… Hasta la semana que viene.
