Natalia Gil, regidora de Ciutadans en l’Ajuntament de Vila-real
Las sucursales bancarias han perdido ese espacio casi familiar al que acudían las personas mayores a cobrar la pensión, pagar algún impuesto y compartir un rato con las personas que les atendían a las que solían conocer de toda la vida.
El cierre de sucursales, limitación de horarios para ingresar o sacar dinero son medidas que los bancos han tomado, mientras avanza la digitalización olvidando a los mayores que no disponen de los conocimientos para operar con internet o con aplicaciones móviles.
La digitalización conlleva muchos beneficios, pero no podemos exigir a los mayores que realicen operaciones para las que no están preparados y que la solución pase por delegar en algún familiar o persona de confianza.
Las mismas barreras encuentran en muchas relaciones con la Administración de Hacienda, Seguridad Social, Administración local o Sanidad.
A las limitaciones tecnológicas hay que sumar la falta de cajeros para personas con movilidad reducida o visión limitada y más ayuda personal que facilite el uso de los sistemas disponibles.
Desde Ciudadanos Vila-real apostamos por unas políticas que estrechen la colaboración entre las Entidades Bancarias y la propia Administración con la finalidad de humanizar la digitalización. Adoptar medias como acuerdos de colaboración con la Banca para mejorar la atención, instalación de cajeros adaptados y reforzar la formación en nuevas tecnologías para que los mayores tengan esa buena atención que se merecen.