Francisco Navarro Blasco. Presidente de la Sociedad Valenciana de Reumatología
Las complicaciones que genera el humo del tabaco en la salud de los pacientes reumáticos son densas y alargadas. El consumo de tabaco incrementa el riesgo de padecer alguna enfermedad reumática y enfermedades autoinmunes sistémicas, como el lupus eritematoso sistémico, la uveítis, la artritis reumatoide o la osteoporosis, entre otras. Hoy se conmemora el Día Mundial Sin Tabaco y, desde la Sociedad Valenciana de Reumatología, aprovechamos para incidir en la necesidad de evitar el consumo de este producto nocivo, que agrava la calidad de vida de los pacientes reumáticos.
Los efectos de las sustancias que esconde un cigarrillo no solo incide en el aumento de casos de determinadas patologías reumáticas, sino que además puede conducir al empeoramiento de la enfermedad e incluso puede conllevar a la aparición de otras enfermedades cardiovasculares. En este sentido, en los pacientes reumáticos con problemas inflamatorios, el consumo de tabaco es especialmente dañino, puesto que dicho consumo puede derivar en la aparición de un accidente cardiovascular, incrementando así los riesgos para la salud del paciente.
La fibromialgia y la espondiloartritis son dos claros ejemplos de enfermedades que pueden verse agravadas debido al consumo de tabaco. La solución la tenemos a nuestro alcance, es totalmente accesible, aunque no por ello es más sencilla. Se trata de concienciar al paciente para que abandone este mal hábito en aras de favorecer y mejorar su calidad de vida. Se debe trabajar, por tanto, desde una perspectiva multidisciplinar médica para conseguir que el paciente sea capaz de dejar este hábito de consumo, que en nada beneficia a su salud.
En casos como la artritis reumatoide existen estudios que sitúan al tabaquismo en el punto de mira. Tanto es así que se estima que el consumo de tabaco puede aumentar hasta cuatro veces más el riesgo de padecer artritis reumatoide, una cifra nada desdeñable que debe hacer reflexionar al paciente fumador y llevarle a actuar de inmediato.
La predisposición a sufrir más fracturas en pacientes con osteoporosis también ha sido más que demostrada por los estudios científicos realizados hasta el momento. Pero igualmente en los casos de espondiloartritis se ha detectado una mayor incidencia de lesiones cuando se practican radiografías en la zona de la columna del paciente fumador en comparación con el paciente no fumador.
Todo esto nos lleva a luchar contra el tabaquismo en todos los pacientes, y especialmente en los pacientes reumáticos. Si sabemos que una sustancia es nociva para nuestro organismo, debemos evitar su consumo para que nuestra calidad de vida mejore. En el caso de los pacientes reumáticos, el tabaco favorece la aparición de determinadas enfermedades, de ahí que aprovechemos estas líneas, coincidiendo con la celebración del Día Mundial sin Tabaco, para animar a los pacientes a que dejen este hábito no saludable.
