Noticias Castellón
jueves, 28 de marzo de 2024 | Última actualización: 21:00

Vithas alerta que sufrir un microictus puede derivar en cambios de personalidad

Tiempo de Lectura: 3 minutos, 28 segundos

Noticias Relacionadas

Una de las zonas cerebrales afectadas es la estructura subcortical que provoca tendencia a la apatía. También se pueden producir alteraciones emocionales, tendencia a la irritabilidad o en algunos casos agresividad 

Castellón Información

Microictus o mini-ictus, ictus leve o accidentes isquémicos transitorios, son los nombres que se utilizan en la literatura científica para denominar a los ictus que afectan a zonas muy pequeñas en el cerebro, muchas veces microscópicas, y que en la mayoría de los casos, suelen pasar desapercibidos en forma de malestar general, sensación de náuseas o mareos. Normalmente, remiten sin sintomatología neurológica y sin secuelas aparentes.

Sin embargo, si siguen ocurriendo con el paso del tiempo, la zona del cerebro dañada se va ampliando, por lo que comenzará a dar síntomas sutiles, en forma de cambios cognitivos o conductuales o, incluso, si la zona afectada es más grande, pueden llegar a ser físicos como alteraciones de la marcha, alteraciones para tragar líquidos o temblores.

Tal como explica la doctora Belén Moliner, directora médica de Vithas NeuroRHB, ubicado en la capital valenciana el Hospital Vithas Valencia Consuelo, que también cuenta con centros en Elche, Sevilla y Vigo, "el cambio de personalidad se define como una alteración persistente de la personalidad que constituye un cambio con respecto al anterior patrón característico de comportamiento. Por ello, si un familiar nos advierte sobre alteraciones de comportamiento en un paciente, siempre tenemos que plantearnos la posibilidad de que haya algún daño cerebral que, probablemente, no haya dado síntomas físicos, pero que esté provocando un cambio de personalidad".

La enfermedad vascular cerebral es una enfermedad silente pero tremendamente devastadora, que puede llegar a provocar cambios en la persona y hacerla una persona distinta. "La mejor forma de evitar que la enfermedad avance es la prevención primaria", comenta la profesional.

Cambio de personalidad relacionada con los microictus

La personalidad es el conjunto de rasgos psíquicos que se desarrolla desde el nacimiento y que se mantienen de manera permanente manifestándose en todas las áreas de funcionamiento y comportamiento de forma automática. Es lo que hace a cada persona única y especial.

Según la doctora Moliner, "los microictus pueden provocar cambios en la personalidad de la persona, sobre todo, en su forma de actuar, en su iniciativa o, incluso, en su manera de expresar los afectos, ya que una de las zonas cerebrales que más suele verse afectada en esta enfermedad es la estructura subcortical, que provocará un enlentecimiento progresivo en la persona, y una tendencia a la apatía".

"Por este motivo, -subraya la especialista-, el microictus puede provocar también alteraciones emocionales, tendencia a la irritabilidad o en algunos casos agresividad. También puede hacer que la persona tienda a estar menos prudente a la hora de relacionarse a nivel social". Este cambio de personalidad es muy lento y progresivo, por lo que es difícil de detectar en muchas ocasiones. Empieza con cambios sutiles y con el tiempo va acaparando de forma total el comportamiento de la persona.

Diagnosticarlo y empezar a tratarlo en un servicio especializado, es realizar prevención terciaria y puede ayudar considerablemente tanto al paciente como a su familia. Tal como explica la directora médico de estos centros de neurorrehabilitación de referencia, " ya que puede minimizar los síntomas y mejorar la funcionalidad, aprender nuevas pautas de comportamiento y, sobre todo, a conocer y comprender la enfermedad. Una familia que conoce la enfermedad es una familia empoderada y con más recursos, y, por tanto, una familia más feliz".

Desde Vithas NeuroRHB aconsejan, "realizarse un chequeo anual que incluya una analítica general, para revisar la tensión arterial, el funcionamiento cardíaco y los parámetros analíticos. Evitar los hábitos tóxicos, como el tabaco, las sustancias de abuso y la comida grasa en grandes cantidades, ya que aumentan el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares y hacer deporte moderado como caminar, ya que activa la circulación de todo el organismo, lo oxigena y alimenta".