F. A.
Se notaba y se palpaba que este partido no se podía perder. Se tenía que ganar. El dominio del Villarreal se combinó con las prisas, y después con la precipitación. Más tarde se perdió el control del partido, al menos desde el minuto treinta hasta el descanso. El segundo acto tampoco empezó bien, pero un extraordinario gol del brasileño Leo Baptistao sirvió para encarrilar el partido y sumar los tres primeros puntos de esta décima participación en competición europea.
Esta competición ahora dará un respiro. No se reanudará hasta el día 22. Y la escuadra vila-realense volverá a jugar como local. Recibirá al Dinamo Minsk. Antes, la Liga. El equipo de Marcelino García Toral, líder de la Primera División, jugará el domingo en el campo del Levante (18.15 horas). Luego la Liga se parará para los compromisos de la selección española.
Arranque y a por todas
La embestida del Villarreal, en el arranque del partido, fue de aúpa. El equipo de Marcelino García Toral asedió la portería de su rival, por diestra y siniestra. Desde lejos y desde cerca. Mucho ataque, muchos centros, varios remates, y mucha precipitación. Rukavina, Nahuel y Castillejo se hincharon a centrar balones, pero ni Roberto Soldado y en especial Leo Baptistao lograron perforar la portería de Kozácik.
En el minuto 20 Soldado cabeceó de manera forzada, pero el efecto óptico hizo cantar gol a más de uno. Una autopista por el carril izquierdo. Y en el minuto 20 era milagroso que el marcador siguiese sin verse alterado: 0-0. El Viktoria Plzen se defendió como pudo y de vez en cuando lanzó alguna contra. Tímida. Sin peligro.
Los checos se fueron animando
Desesperación en el campo, en la grada y en el entrenador, al que se vio muy activo en la línea de banda porque veía como su equipo tenía el balón, dominaba y creaba peligro, pero se estrellaba en la defensa checa. Además, el Viktoria Plzen poco a poco se fue animando y cada vez que cruzaban el centro del campo. Y así, como el que no quiere, el primera acto acabó con el balón para los checos. Estuvieron cómodos con el balón en los pies. Así que 0-0 al descanso.
El segundo tiempo arrancó tal y como acabó el primero. No es que sufriese el Villarreal, pero estuvo muy en su campo porque su rival tenía balón y le hizo recular. Todo hasta que el brasileño Leo Baptistao desatascó el partido. La jugada se la fabricó él, y Roberto Soldado arrastró a los centrales, se quedó sólo ante el portero que ‘cantó’ y el balón acabó al fondo de las mallas. Era lo que le faltaba al partido.
Control de la situación
Con el partido encarrilado el equipo de Marcelino García Toral se dedicó a controlar la situación y a intentar marcar el segundo gol para rematar la faena. El Viktoria Plzen tocó y tocó, pero sin tanta claridad como en la primera parte. Los checos no es que bajaran los brazos, pero sí que bajaron su presión.
Roberto Soldado intentó ese gol de la sentencia que se le escapó en dos o tres ocasiones. El gol de Baptistao fue suficiente para asegurar los tres primeros puntos para el equipo de la Plana Baixa, que se quitó un peso de encima porque hacía mucha falta este triunfo tras perder en la jornada inaugural.
La tercera jornada de esta Liga Europea tendrá lugar el jueves 22. El Villarreal repetirá como local recibiendo al Dinamo Minsk, a partir de las 21.05 horas. La próxima cita para el ‘Submarino’ amarillo será este domingo en el Ciutat de Valencia contra el Levante, a las 18.15 horas.
FICHA TÉCNICA:
-1- VILLARREAL: Barbosa; Rukavina, Bailly, Víctor Ruiz, Jaume Costa; Nahuel (Samu García, min. 83), Bruno Soriano, Dos Santos (Manu Trigueros, min. 76), Castillejo; Leo Baptistao y Soldado.
-0- VIKTORIA PLZEN: Kozácik; Horava, Limbesky, Kopic (Hedja, min. 81), Petrzela (Mahmutovic, min. 75), Duris, Hrosovsky, Kovarik (Vuch, min. 88), Prochazka, Baranek y Rajtoral.
EL GOL: 1-0, min. 54: Baptistao.
ÁRBITRO: Serdar Gözübüyük (NED). Amonestó al local Eric Bailly; y al visitante Horava. Expulsó al visitante Procházka (min. 80) por doble amarilla.
CAMPO: El Madrigal, ante unos 12.000 espectadores. Noche fresca y con amenaza de lluvia.
