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viernes, 29 de marzo de 2024 | Última actualización: 21:59

Una gran anomalía

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Aunque no me gustan ni soy partidario de las afirmaciones tajantes, rotundas, en este caso sí me atrevo a afirmar claramente que el comportamiento del paro registrado en la provincia de Castelló en febrero, en modo alguno, significa un cambio de tendencia en la economía castellonense.

Y me apoyo para afirmar lo anterior en que desde 1994 solo se han dado descensos en el paro registrado en la provincia en febrero en los años 1998 y 2000; por tanto, 2023 es el primero de este siglo.

Hay que significar que el retroceso del paro registrado se manifiesta en industria y en construcción lo que indica que estos sectores,a pesar del problema del gas y la incertidumbre internacional el primero y la climatología el segundo, siguen manteniendo el tipo.Sin embargo, Castelló ha sido la 34ª provincia en términos porcentuales, de las treinta y seis que ha registrado disminuciones.

Pero, es en el sector servicios en el que se da una mayor disminución del paro registrado, 118 personas, lo que es totalmente anormal respecto a lo acaecido en febrero de años precedentes.

Sin embargo, aparte lo anómalo o anecdótico de este retroceso, es preocupante el hecho deque la provincia sea este febrero la cuarta, tras Melilla, Guadalajara y Cuenca, que ve incrementado el número total deparados respecto a febrero de 2022. Lo mismo ocurrió por primera vez el mes anterior.

La contratación también registra un aumento en Castelló, a diferencia delo que seda en la Comunitat Valenciana (CV) y España, respecto a enero y que tiene lugar en el sector agrario (+809 contratos, no atisbo en qué dada la floja segunda campaña citrícola), y en construcción (+216 contratos) mientras los descensos seproducen en industria (-148 contratos) y en servicios (-748 contratos).

Por otra parte, seconstata la menor dinamicidad de la actividad económica si comparamos el númerode contratos deeste mes con su homónimo de 2022: se dan retrocesos, sobre todo en servicios e industria y, luego, en construcción, y avances en agricultura. Y se constata también al comparar el montante delos contratos del primer bimestre de este año respecto a 2022: se registra una disminución del 25%, similar ala de España, e inferior ala de la CV. Y se continúa sin alcanzar el nivel de contratación previoa la pandemia: es una tercera parte inferior, porcentaje parecido al español y algo menor que el de la CV.

Pero, también hay otros datos buenos en este mes que no son anómalos; se trata de la contratación indefinida. Tras la reforma laboral el porcentaje de contratos indefinidos ha subido como la espuma y, si a finales de febrero