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jueves, 16 de mayo de 2024 | Última actualización: 18:55

Arrancan las esperadas obras de derribo de los antiguos juzgados de Vila-real

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Está previsto que los trabajos finalicen antes de las fiestas patronales de septiembre

El próximo jueves volverán a cerrar los puestos del mercado y los comercios colindantes

Clara Parra

Tras el retraso originado por las peticiones de los vecinos de la zona de la plaza Colón y alrededores del antiguo edificio de los juzgados en Vila-real, esta mañana han arrancado las obras de derribo de este inmueble que se desarrollarán durante todo el verano.

Durante la jornada de hoy se han instalado en los alrededores dos grandes grúas cuyo principal cometido ha sido ir desmontando la estructura de hormigón pieza a pieza para posteriormente picarse en la propia calle, tal y como detallaron en su día a los vecinos los responsables municipales.

Así, durante la jornada de hoy han cerrado sus puertas los comercios de la plaza Colón que cuentan con sillas y mesas en el exterior, así como las paradas del mercado central con el objetivo de garantizar la máxima seguridad de vendedores y compradores. Una operación que volverá a repetirse únicamente el próximo jueves cuando de nuevo deberán volver a bajar la persiana por seguridad.

De esta manera, han arrancado por fin una de las obras más esperadas tanto por el ejecutivo local como por parte de los vecinos que está previsto que se desarrollen durante todo el verano y suponen el corte al tráfico rodado del último tramo de la calle Ermita, Doctor Font así como del vial Joan Pau II por donde se sacarán los escombros que ocasionará el derribo.

Además, hasta final de obra estará cerrado el parking del edificio del mercado, mientras que hasta el próximo 10 de julio también quedará cortado el acceso de la puerta del mercado de la iglesia Mayor así como el acceso a la casa abadía por la plaza Colón.

La intención es que los trabajos finalicen a finales del mes de agosto y permitan habilitar en superficie una plaza provisional diáfana donde se instalará mobiliario urbano y se plantean trasladar hasta allí diversas actividades comerciales y lúdicas de la localidad. La siguiente fase, de la que todavía no hay fecha, consistirá en el derribo del actual mercado central para construir uno nuevo y reformular el aspecto de esta céntrica zona de la ciudad.