Benicàssim, capital de la provincia por un día con fuertes medidas de seguridad para evitar actos terroristas e impedir el acceso de vehículos o camiones a la zona del evento
Entre 30.000 y 35.000 personas se han concentrado en Benicàssim para disfrutar del Día de las Paellas, calificada de Interés Turístico Autonómico. Medidas de seguridad ‘severas’ para vigilar, garantizar la seguridad, y prevenir cualquier asomo de acto terrorista que pudiera aprovechar la alta concentración de personas. El acceso a la zona, ‘blindado’ para impedir el paso de vehículos o camiones. Benicàssim se convierte por un día en la capital de la provincia
Benicàssim ha disfrutado de un espléndido ‘Día de las Paellas’, muy diferente al del año pasado que estuvo pasado por lluvia. Hoy lucía un cielo despejado, sol, y temperaturas que han alcanzado los 20 grados. Unas condiciones que han sido decisivas para generar una concentración de entre 30.000 y 35.000 personas.
La fiesta en Benicàssim comenzaba pronto. No era para menos, tocaba: coger mesas, preparar sillas, encontrar la ubicación adjudicada… este año han sido 1.300 las solicitudes… y acompañar la faena con un buen almuerzo ¡Cómo está mandado!
Eran las 12:00 del mediodía y ya Benicàssim estaba lleno cuando comenzaron a prepararse los fuegos en las zonas prefijadas, sobre montones de tierra para no dañar el pavimento. Los más exquisitos preparaban las maderas con astillas pequeñas para garatizar que el fuego prendiera en condiciones. Mientras, el resto de las comitivas cortaba ya la verdura, la carne y los condimentos para cocinar.
Pero ojo, las paellas (los recipientes) debían estar limpias y preparadas. Muchas de ellas brillaban ya preparadas para el inicio de la faena, mientras no faltaba algún pequeño que se sentaba encima como si fuera el mejor de los juguetes.
El día de las Paellas de Benicàssim es siempre un acontecimiento importante para ver y dejarse ver. Una cita obligada en la que es imposible desplazarse dos metros sin un par de besos, tres abrazos o cincuenta saludos como poco.
‘Los del pueblo’, peñas y collas, vecinos, amigos, y otros colectivos que disponen de espacios propios, cocinan en los garajes o al aire libre, pero delante de casa.
Pero también hay muchos que se apuntan a la fiesta porque les va la marcha, y en Benicàssim no faltan muchas de las collas o entes vinculados de la capital de la Plana.
Compañeros de oficina, empresas, colectivos, grupos políticos y miles de personas procedentes de toda la provincia, se volvieron a dar cita en el municipio benicense.
De esta forma, tanto la avenida central como las calles adyacentes se llenaron poco a poco de gente que llenaba todos los rincones. Entre ellos paseaban las festeras de Benicàssim, acompañadas por la charanga; algunos de los chiringuitos aportaban su componente musical, y la gente bailaba en la calle y coreaba a voz en grito algunos de los temas más populares.
En una de las calles había dos grandes banderas que aireaban al viento, la española, junto a la bandera de los Tercios Españoles. Múltiples escenarios para las actuaciones del día, pero, sobre todo, mesas interminables para comer por todas partes.
Porque a las paellas ‘caseras’ se suman también las ciento de ellas, por encargo, que preparan los restaurantes.
En torno a las 13:00 horas, las paellas ya estaban en pleno proceso de cocinado. Los comensales abrían boca con suculentos aperitivos, y las calles se llenaron de humo y de aromas.
Los Grupos Políticos dejan su impronta en Benicàssim
Los ‘imprescindibles’ en esta jornada fueron también los grupos políticos. En estos casos, son los representantes nativos los que invitan a todos los integrantes del partido. Cada uno tenía su zona ya delimitada y presumía también de citar con ellos a los representantes del más alto escalafón provincial o nacional.
Aunque antes de sentarse a comer tocaba pasear y darse un baño de multitudes.
El Partido Popular tenía su zona acotada delante de su sede, delante de la antigua estación, hoy central de la Policía Local.
La presidenta de la Diputación Marta Barrachina, la delegada del Consell, Susana Fabregat, y los diputados provinciales ‘arropaban’ a la alcaldesa de Benicàssim, Susana Marqués. La primera autoridad de Benicàssim disfrutaba de la fiesta al tiempo que comprobaba el buen funcionamiento de la jornada.
La alcaldesa de Castellón, Begoña Carrasco, con sus concejales de la capital de la Plana también acudía a la cita del municipio de Benicàssim, lleno hasta la bandera de vecinos de Castellón.
Entre los comensales del PP, el conseller Martínez Mus acompañado por el presidente de PortCastelló
Barrachina, refuerza su apoyo al Día de las Paellas de Benicàssim como gran atractivo turístico

La presidenta de la Diputación Provincial ha destacado, que sin duda hoy, día de las Paellas, Benicàssim se ha convertido en la capital turística de la provincia. “El Día de las Paellas de Benicàssim es una jornada en la que se conjuga la música, la gastronomía, la hermandad, la convivencia y la solidaridad”.

Y es que el Día de las Paellas es un ejemplo de cómo una fiesta que comenzó en 1980 como un mero concurso de paellas en el que participaron cerca de 40 paellas, “a día de hoy se ha convertido en una cita de referencia y marcada en el calendario por los miles de visitantes que vienen procedentes de distintos de la provincia e incluso más allá del territorio español”.

La presidenta de la Diputación también ha resaltado la vertiente solidaria de esta cita ya que el tradicional almuerzo de hermandad celebrado esta mañana destinará la recaudación a las personas afectadas por la DANA.
Barrachina ha mostrado la apuesta de Diputación por las fiestas de interés turístico de la provincia, con un presupuesto de 140.000 euros destinados a subvenciones a ayuntamientos para la organización de fiestas de declaradas de interés turístico.
El PSOE tenía su mesa en el tramo final de la avenida Santo Tomás de Benicàssim. Allí se dieron cita también los diputados autonómicos como Rafa Simó, o los representantes nacionales como la senadora Eva Redondo o el diputado Artemi Rallo. Y todos ellos posaron para la fotografía de Castellón Información.
Compromís repetía sitio, en el carrer Santa Águeda, cerca de su sede; pero en esta ocasión, un poco más arriba para aprovechar el sol del mediodía. Aunque este año, no hacían faltas abrigos ni chaquetas y seguramente más de uno pasó calor. Los de Compromís pasearon a Joan Baldoví, portavoz de los valencianistas en les Corts. Estaba acompañado por diputados autonómicos como Verónica Ruiz, pero también de concejales de Castellón y representantes en los ayuntamientos de la provincia.
VOX también repetía sitio un poco más allá del PSOE, en el tramo final de Santo Tomás. Los concejales de Benicàssim contaron con la presencia de la presidenta de Les Corts, la castellonense Llanos Masó, además de sus representantes públicos en el parlamento nacional, autonómico y municipios de la provincia.
La algarabía llegó a tal extremo, que había zonas por donde era casi imposible desplazarse entre el gentío, las mesas, las hogueras con las paellas…
Medidas de Seguridad
Aunque el ambiente estaba relajado y la fiesta y la música llenaban el centro de Benicàssim, las medidas de seguridad para este acontecimiento han sido extremas. Por poner un ejemplo, toda la zona de las paellas estaba blindada y acotada por grandes bloques de hormigón para impedir el paso de coches o camiones. El objetivo, evitar sustos como el que se produjo la pasada navidad en una ciudad alemana, y la tentación de que alguien hubiera querido lanzar un coche a toda velocidad sobre la gente.
Además, agentes de la Guardia Civil armados hasta los dientes se paseaban entre el gentío.