En junio de 2021, el Partido Popular de la ciudad de Castellón presentaba una iniciativa en el pleno instando a buscar un acuerdo por parte de todos los grupos para Ayuntamiento y Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ), las dos entidades que tienen potestad administrativa, tomasen medidas y procediesen, sin más demoras, a la limpieza, adecuación y mantenimiento de los cauces de la ciudad de Castellón.
Plasmábamos así, sobre el papel, una demanda que nos habían trasladado los vecinos del distrito sur de Castellón, en concreto los del Barranquet, que denunciaban la situación de abandono que sufre el cauce que cruza el barrio y que da nombre precisamente a este punto de la ciudad.
Inmediatamente, pusimos la maquinaria en marcha y plasmamos sus peticiones en una moción que ampliaba estos mismos objetivos al resto de riberas de Castellón, es decir, el Barranco del Sol, el Barranco de Fraga y sobre todo el Riu Sec, ya que todos presentan el mismo estado de abandono. Especialmente grave es el panorama de este último, ya que en muchos puntos, el cauce se encuentra lleno literalmente de árboles de grandes dimensiones, además de cañares y otras plantas, que se convierten en diques de efectos incontrolados ante las grandes avenidas.
La iniciativa del Partido Popular arrancóel apoyo de todos los grupos políticos. Tan obvia es la necesidad y tan visible la urgencia de llevar a cabo actuaciones que, por una vez, dieron su apoyo a la propuesta. Una lástima que el compromiso haya quedado en papel mojado. Y no por la lluvia, sino por la falta de gestión y de pulso que tiene el equipo de gobierno de Amparo Marco. Ni cumplen lo que prometen. Esta semana, hemos vuelto a recorrer los cauces, y todos ellos presentan el mismo panorama, agravado por el año transcurrido.
¿Qué más tiene que ocurrir para que el equipo de gobierno de PSOE, Compromís y Podemos tome en serio sus propios acuerdos? Encaramos la temporada de gotas frías y DANAS con advertencias por parte de los meteorólogos de que los episodios de lluvias torrenciales pueden ser especialmente intensos como consecuencia del fuerte calor que hemos padecido los meses de julio y agosto –y que seguimos padeciendo aún en estas fechas-- así como a las altas temperaturas del mar. Un cóctel que cuando decide descargar ya sabemos la bravura con la que puede llegar a hacerlo.
Más de un año han tenido de tiempo, pero unos y otros, la casa por barrer. Ni la CHJ cumple su parte, ni el Gobierno municipal de Amparo Marco toma como propia su responsabilidad, la que tiene por tener en su término municipal cauces de escorrentías sin condiciones de seguridad para los castellonenses. De una concejalía a otra, de urbanismo a transición ecológica, o seguridad ciudadana… ¿quién le pone el cascabel?
Desde el Partido Popular, nos ponemos del lado de los vecinos, que ven con mucha preocupación, y así nos lo vuelven a trasladar, que los cauces y barrancos de Castellón no están preparados para las lluvias de otoño. Pedimos medidas urgentes. Más vale prevenir que lamentar.
