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Kiko Ramírez, entrenador del Castellón, lanzó hoy varios mensajes al Atlético Malagueño, su rival mañana en Castalia en el partido de ida de la semifinal por ascender a Segunda B. El técnico tarraconense aseguró, en clara referencia al filial malagueño, que “ese equipo no se puede encontrar cómodo en Castalia”, para agregar que “la gente desde la grada apretará mucho. Esto será una olla a presión”, para rematar diciendo que “nosotros vamos a salir con el cuchillo entre los dientes”.
Se mostró “sorprendido” por las declaraciones que llegan desde Málaga donde se dice que el filial no tiene presión por ascender de categoría, como sí que tiene el Castellón. “Un equipo como el Málaga, que está en Primera División, en la élite, necesita un filial lo más arriba posible. Mínimo lo debe tener en Segunda B”. Y otra vez se mostró contundente: “Nosotros sí que nos jugamos muchísimo, posiblemente más que ellos”.
Y es que como bien dejó claro el máximo responsable del equipo de al capital de la Plana “nosotros nos jugamos muchísimo en este partido. Posiblemente más que ellos”. Por todo ello hizo un llamamiento al albinegrismo de cara a este encuentro que considera “muy importante». “La afición es muy importante para el camino que nos queda por recorrer”, destacó.
Ramírez habló del Atlético Malagueño y aseguró que es un equipo que cuenta con una “calidad individual muy alta. Jugadores muy trabajados. Casi todos internaciones en categorías inferiores. En el fútbol no sólo cuentan los aspectos individuales. Cuentan los colectivos y ahí creo que ahí entramos nosotros”.
Tres bajas seguras para el domingo
Para el partido del domingo están descartados al 100% los delanteros Tariq Spezie y Rubén Fonte, por lesión. “De Antonio no tenemos el OK médico. Quizá nos precipitamos si compite esta semana. La novedad será el regreso del lateral derecho Luismi Ruiz una vez ha cumplido los cuatro partidos de suspensión.
