Llega la hora de la verdad para el Villarreal B, que tiene que opositar por recuperar plaza en la Liga Adelante, y para los dirigentes del filial. La última lesión sufrida por uno de sus mejores futbolistas, Pepe Palau (rotura de todos los ligamentos de la rodilla izquierda, menisco y tiene afectada la tibia), un vacío muy importante en el centro del campo. El chaval de Ibi estará entre ocho a nueve meses de baja. También no podrá competir en el próximo mes y medio el defensa central Diego Jiménez (rotura muscular de grado 2 en el adductor medio de la pierna izquierda). Dos ausencia que pueden hacer mella en el equipo que entrena Lluis Planagumá. Y es que las lesiones no están dejando respirar al 'Submarino' B. Una plaga desde que arrancó la temporada.
La grave lesión de Pepe Palau y la cesión del lateral Toño García al Recreativo han debilitado el plantel.