Noticias Castellón
martes, 24 de junio de 2025 | Última actualización: 21:15

Cuenta atrás para selectividad: los estudiantes conquistan las bibliotecas

Tiempo de Lectura: 2 minutos, 28 segundos

Noticias Relacionadas

Cientos de jóvenes ultiman su preparación para las Pruebas de Acceso a la Universidad en Castellón

Para los estudiantes, que llegue el buen tiempo solo puede significar una cosa: época de exámenes. Las bibliotecas se llenan de alumnos nerviosos, cargados de apuntes y con la cabeza puesta en una única meta. Pero quienes realmente llevan la presión al límite son los que se preparan para las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU). No es para menos, llevan todo el curso estudiando para plasmar su aprendizaje en tres días clave

Este año, el número de inscritos para la convocatoria ordinaria de junio en la Universitat Jaume I ha aumentado un 3,1%, lo que se traduce en 2.879 estudiantes que se presentan a selectividad. Este crecimiento también se refleja fuera del campus, en las bibliotecas de la ciudad.

Para muchos, estos espacios se han convertido casi en su segunda casa… y en algunos casos, en la primera. En la Biblioteca Pública del Estado, lo han notado. “La semana pasada fue cuando se empezó a notar el aumento en la afluencia”, explica la técnica de biblioteca del centro. El flujo no da tregua, “es algo constante, a todas horas. Incluso antes de abrir, ya hay estudiantes esperando en la puerta para entrar”, añade. 

Estrategias para organizar el estudio

Ante esto, la organización del tiempo es clave, aunque no todos siguen la misma estrategia. Hay quienes planifican su estudio con precisión milimétrica y llevan semanas siguiendo un calendario de estudio detallado, otros, en cambio, reconocen que improvisan, es decir, se marcan unos objetivos diarios, pero no siguen un cronograma fijo y otros a los que, directamente, ‘les pilla el toro’, apuran los días con la esperanza de que les dé tiempo, y si no, confían en poder presentarse a la segunda convocatoria, en julio.

Cada cual busca la fórmula que mejor encaje con su estilo de aprendizaje. En los últimos años se ha popularizado el método pomodoro, que consiste en estudiar 25 minutos y descansar 5. Otros prefieren la repetición activa, los esquemas, los mapas mentales o motivarse con pequeñas recompensas tras cada tema, como un descanso, algo para picar o unos minutos de desconexión.

Gestionar los nervios y la presión

A medida que se acercan los exámenes, los nervios se intensifican. Algunos los canalizan con deporte o meditación y otros optan por mantener una rutina estricta los días previos: dormir bien, comer ligero y repasar lo esencial.

Aunque el estudio es individual, muchos encuentran alivio hablando con sus compañeros. Compartir dudas, repasar en grupo o simplemente desahogarse sirve para liberar la presión y recordar que no están solos en el proceso. En los últimos días, la tensión acumulada se convierte en una mezcla de cansancio, concentración y ganas de que todo termine ya.