Federico Arnau. Comerciante jubilado.
Vergüenza fue la palabra más repetida durante las dos horas largas del discurso de Irene Montero en la defensa de la moción de censura que Podemos interpuso en el Congreso de los Diputados.
En la mañana del martes 13 comencé a seguir el debate, a través de La 1 y Antena 3, pero a la primera interrupción en ambas cadenas, para dar paso a las opiniones de sus contertulios, decidí probar en 24 horas, y premio, emisión sin interrupciones puesto que se transmitía en una pequeña ventana los signos para las personas sordas, y digo premio , porque en algo tan importante no te puedes perder ninguna frase , gesto para poder hacer una valoración real, puesto que para mí me interesaba más esto que las opiniones de los contertulios.
También tengo que decir que solo lo seguí el martes puesto que lo interesante era sobre todo el discurso y las propuestas del candidato, y las respuestas del Presidente, sin menospreciar las intervenciones del resto, el interés se había producido el martes, dejando solo los momentos finales del miércoles 14.
Después de haber escuchado y visto la intervención de Inés Montero y la de Pablo Iglesias, se me planteo una duda.
Si tuviese que elegir entre Inés y Pablo, ¿a quién daría mi apoyo? Después de reflexionar y sabiendo que mi apoyo no es merecedor para ninguno de los dos, entiendo que de ser necesario seria para Inés, le dio un baño a su jefe, aunque el discurso que relato en la tribuna, quitando las repeticiones, se hubiese reducido unos 45 minutos, un discurso que lo puedo hacer yo mismo o cualquiera, pues decir una batería de todo lo habido y por haber desde que el ‘homo sapiens’ existe, es muy fácil.
Pero más grave o muy grave fue el discurso del candidato, Pablo Iglesias, repitiendo exactamente los mismo que su portavoz, alargando inverosímilmente su discurso cuando debería de haber planteado sus propuestas, críticas a las del gobierno y desglosar cada una de ellas, para poder exponer que acción aria si gobernase, como lo aria y como se financiaría, cada partida dando datos reales.
Pero Pablo Iglesias no tiene proyecto, no tiene ideas, y no sirve para ningún cargo de responsabilidad, y esto lo demostró en sus intervenciones, y la más grave de todas es que no se pronunció con el tema de Cataluña, fue frases hechas y balones fuera.
Iglesias, lo único que perseguía es conseguir con esto después de las estadísticas en la que indican que ha perdido votos, es una publicidad gratuita, impagable, que internacionalmente se llama marketing , y es este tema el que lo manejan muy bien y de hecho el mismo se declara no presidenciable, cuando todos sus guiños van hacia el PSOE , para que sea este partido con el ahora su secretario general Pedro Sánchez, quien presente otra moción de censura antes de diciembre, puesto que con sus votos y quienes le han apoyado, más la abstención del PSOE suman el sor paso de gobierno.
Pablo Iglesias solo se escudó en propagar que Rajoy había dicho que no respondería, y que no ha tenido otra opción, y de esto se engrandece. ¿Cómo debe sentirse orgullo de esto? En el caso de que el Presidente del Gobierno hubiese dejado sus respuestas a la Vicepresidenta, Pablo iglesias hubiese sacado pecho diciendo que el Presidente de España no tubo valentía para responderle, la cuestión es que tiene excusa para cualquier cosa, lo que no tiene excusa es para admitir que hizo el ridículo tanto, que su compañera y portavoz se lo merendó, y se ha descubierto que con el tiempo puede ser una gran parlamentaria, cosa que él no lo es.
La ignorancia de Pablo Iglesias y la historia
En su discurso y haciendo repaso a las regiones y nacionalidades de España se refirió a la Comunidad Valencia, Antiguo Reino de Valencia, como País Valenciano.
Solo tiene que consultar el Artículo primero hasta el Séptimo del Estatuto de Autonomía para saber que la El Antigua Reino de Valencia admite la denominación de Comunidad de Valencia, dentro de las Regiones Europeas, y se alude en todos ellos al pueblo valenciano, no País Valencià.
Por lo tanto un profesor universitario, carece de estudios históricos, ni siquiera para eso.
Dentro de su discurso, y la corrupción del PP, sin decir como presidenciable que medidas tomaría para no solo combatir la corrupción del PP si no la de los demás partidos incluso el suyo, porque no pagar la seguridad social de su mano derecha y de su socio Izquierda Unida, también es corrupción, deja entre dicho que no está capacitado para obtener tal honor.
Pero no solo le dio un baño el Presidente de España, sino el portavoz del PP, Rafael Hernando.
Si usted quiso y dijo que el PP tenía más corruptos fuera y encarcelados que diputados hay en el Congreso, fue muy ingenuo, tan ingenuo que le dio en toda la cara y usted no acacho la cara de vergüenza señor Iglesias, cuando el señor Rafael Hernando le saco la lista de los que en sus filas hay ex terroristas, acosadores, agresores a las fuerzas de orden públicos, pederastas, alteradores del orden público, y estos no están fuera, los tiene usted en los bancos del Congreso y el Senado.
Señor Iglesias, la única vergüenza que en el Congreso de los Diputados hubo y existido es la poca que usted tubo, la que los que le apoyaron y la reacción de cabreo que ustedes hicieron en su bancada dando golpes con las manos a sus bancos, y luego tienen el cinismo de decir que estaba nervios el señor Rajoy, por favor, es usted patético, y sobre todo pensando que la inmensa mayoría de ustedes vienen de padres o abuelos que fueron militares del Franquismo y que si el General Franco firmó sentencias muchos de los familiares de ustedes, y del PSOE, como de otras fuerzas pertenecieron a ese ejército.
Cierto que ustedes no tienen la culpa de que sus familiares fuese lo que fueren, no deben de acarrear dicha losa, pero si deben de pensar cuando acusan de donde vienen sus genes, por el bien, la unidad de todos los ciudadanos de este País llamado España.
