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martes, 30 de abril de 2024 | Última actualización: 23:48

El trabajo, la vivienda y la salud, elementos de una exclusión social que hay que afrontar de lleno

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Cáritas destina al menos un 54 % de sus recursos en atención social y un 57 % en acompañamiento familiar 

Castellón Información/Társila Galdón

Cáritas hoy ha celebrado su memoria de actividades del año 2018 basándose en tres de sus focos: Cáritas en la Diócesis de Segorbe Castellón, Cáritas Diocesana y Cáritas parroquiales e interparroquiales . La organización ha ofrecido una versión más cercana de la realidad. Su director, Juan Manuel Aragonés ha ilustrado a los asistentes en su discurso: "El servicio de duchas de los albergues, es importante. Muchas familias en Castellón no tienen acceso a agua limpia" y prosigue: "Algunas personas, no tienen lavadora". De hecho, en el Centro de Acogida Temporal Mare de Déu del Lledó hay 1 811 servicios de lavandería. "Puede ser que haya habido recuperación de las clases medianas o medianas altas, pero las personas empobrecidas, sufren cada vez, mayor exclusión social".

Director Cáritas

Juan Manuel Aragonés ha asegurado que ha habido logros en el quehacer de la Organización, sin embargo, aún "queda mucho por lo que luchar". Los principales problemas a los que se enfrenta Cáritas se pueden resumir en siete puntos esenciales. El primero: el trabajo. "Hemos facilitado trabajo a muchas personas", informa el Director. Concretamente, Cáritas promociona actualmente el empleo a 1 044 personas y son 32 jóvenes los que están bajo formación. Sin embargo, "existen infraestructuras que generan pobreza", insiste su director. La vivienda, que es su segundo principal problema, es un factor clave para salir de la pobreza, pero "los alquileres suben", admite Aragonés. Para pagar una vivienda es necesario trabajar. El hecho de no tener trabajo multiplica por 2'5 puntos el riesgo de exclusión, y multiplica por 3 el riesgo de caer en la exclusión severa.

Su tercer problema, es la salud. La organización ha tratado de ayudar a las personas, sobretodo inmigrantes, a gestionar trámites sanitarios y a facilitar el acceso a los medicamentos. Sin embargo, el acceso a la salud ha empeorado. Según los datos de la Organización, la dimensión de exclusión en la salud ha empeorado respecto 2013. En sus múltiples focos, Cáritas ofrece ayuda en estas cuestiones. Por ejemplo, en Cáritas Diócesis se destina al menos el 3 % de sus recursos en los trámites administrativos. Otro caso similar, es el de Cáritas parroquial e interparroquial, que destinan un 0,69 % en salud. Muy relacionado con el tercer problema, está el cuarto y quinto problema: el acompañamiento, las visitas domiciliarias, la atención y escucha a las personas... A pesar de ser una organización, "para las personas", manifiesta su Director, hay un problema, porque el tiempo de dedicación se reduce ante tanta cantidad de personas que necesitan ayuda. Con exactitud, al menos un 54 % de sus recursos van destinados a la atención social y otro 57 % a los proyectos de acompañamiento personal y familiar.

Memoria Cáritas 2018

Su sexto problema de difícil gestión es saber la manera de luchar contra la exclusión que sufren los inmigrantes. El 53 % de los beneficiarios de Cáritas pertenecen a una población inmigrante. Los inmigrantes tienen mucho mayor riesgo de ser excluidos, según un estudio propio de la organización realizado en 2018. Por ello, manifiesta su director, es necesario "el compromiso social", es necesario "un comercio justo", y también es necesaria la "sensibilización". Por último, el último de sus problemas es ser capaces de sacar de la pobreza a los distintos hogares. La recuperación de la crisis no ha llegado a las familias más pobres. Todos estos problemas se retroalimentan unos a otros, y al final, todo está estrictamente relacionado. Aún así, son distintas las voces de Cáritas las que han hablado esta tarde y manifiestan que es necesario salir al encuentro de los demás y saber ayudar a las personas que más abandonadas y solas se encuentran. "Necesitamos cambiar la mirada sobre la realidad", ha insistido el director de Cáritas.

Durante la jornada se ha hecho referencia a las distintas ayudas que recibe la organización, tanto económicas como voluntarias. Se ha agradecido el compromiso de al menos los 12 000 participantes de las actividades Cáritas, o a los casi 900 voluntarios. También se ha reconocido a los 1 075 socios y socias y a las 115 personas laborales de Cáritas. Durante su intervención, el director de Cáritas también ha hecho referencia a las distintas subvenciones públicas de las que goza la organización, que suponen al menos 1 478 178 euros en Cáritas Segorbe Castellón, 1 112 549 euros en Cáritas Diocesana y 365 629 euros en Cáritas Parroquiales e Interparroquiales. Por otra parte, Cáritas también percibe distintas subvenciones privadas. Concretamente Cáritas Segorbe Castellón ha recibido en 2018 recibe 406 970 euros, Cáritas Diocesana ha percibido 276 614 euros y finalmente, Cáritas Parroquiales e Interparroquiales, al menos  130 155 euros. Juan Manuel Aragonés ha asegurado que desde la Organización también apuestan por "la transparencia y la rendición de cuentas".