Benlloch dice que es el mismo proceder que tenía el PP en gastos de atención protocolaria y asegura que es una “persecución”.
No descarta impulsar una normativa interna para dilucidar las dudas de este tipo de gastos.
El primer edil hace públicas facturas de ágapes sin justificar de la época de Vilanova y Rubert.
Clara Parra Roncero
El alcalde de Vila-real, José Benlloch, ha anunciado que el Consistorio presentará ante el Tribunal de Cuentas una serie de alegaciones para tumbar la denuncia presentada por el grupo municipal del Partido Popular sobre supuestas facturas irregulares de alcaldía por valor de 11.793 euros que se habrían gastado el restaurantes principalmente de la ciudad.
Según el primer edil, el portavoz del PP, Héctor Folgado, y su equipo actúan a mala fe “y tienen una memoria maléfica y mal intencionada a la hora de recordar cosas” ya que, según Benlloch, se trata de gastos “justificados bien por congresos, atenciones protocolarias o comidas de trabajo” que han recibido el visto bueno tanto de la intervención, como del secretario municipal.
Ya que, según ha revelado el munícipe, ambos cargos han realizado sendos informes donde dejan patente que los gastos son legales ya que no existe ninguna legislación en la que se obligue a especificar “con quién se come, por qué y para qué y a pesar de ello nosotros les hemos dicho a los señores del PP cual era el fin general de esas facturas que ellos han llevado al Tribunal para ver si hay suerte y consiguen escampar porquería”, ha expresado.
Benlloch, que ha reconocido estar molesto por este asunto, ha agregado que “estas maneras de actuar demuestran quiénes son y a qué están dispuestos a llegar” ya que, según el primer edil, el cuatripartito nunca ha denunciado ni exigido explicaciones sobre ningún gasto de atención protocolaria pese a existir facturas elevadas “porque confiamos y no teníamos porqué dudar”.
“Nosotros cada tres meses nos sentamos con el interventor y justificamos una a una cada factura por lo que aquí está todo fiscalizado e intervenido. No es la primera vez que si algo no está bien documentado, por un error, nos lo ha tirado atrás y lo hemos pagado nosotros”, ha revelado.
Facturas del PP al descubierto
Entre otras, el alcalde ha mostrado facturas de 2.000 por un aperitivo en la época de Rubert donde no se especifican ni comensales ni motivo, otra de 1.555 euros de 40 cenas, 37 copas y 7 botellas de cava firmada por el propio Héctor Folgado así como otra cercana a los 1.500 euros por 15 aperitivos. “En ninguna especificaron, y hay con menús degustación y whiskys, con quién comían, para qué, qué rendimiento se sacó de ellas y todo lo que ellos nos preguntan a nosotros”, ha afirmado.
El primer edil también ha querido dejar la puerta abierta a la posibilidad de consensuar, entre todas las fuerzas políticas, una normativa interna para regular “mejor” estos gastos “e incluir una especie de resumen adjunto que clarifique lo más posible el objetivo de los gastos”, ha propuesto.
