La educación juega un papel fundamental en la construcción de una sociedad más justa, equitativa y sostenible.
En un mundo en constante transformación, marcado por desafíos de gran altura, la educación de la ciudadanía es clave para trazar el camino a recorrer.
Hasta tener el privilegio de ser la alcaldesa de Almassora siempre he sido maestra de vocación. Una profesión a la que regresaré cuando concluya mi etapa de servicio público ostentando la máxima responsabilidad municipal.
Es esencial que brindemos a nuestros niños y jóvenes las herramientas necesarias para que puedan acceder a una educación en igualdad de condiciones, al alcance de todos, sin excepciones. No es solo un derecho humano esencial, la educación es el motor que impulsa el desarrollo individual y colectivo.
La educación proporciona conocimientos académicos y fomenta valores como la tolerancia, la inclusión y la solidaridad, esenciales para construir una sociedad más equitativa y cohesionada.
Con este espíritu, el de situar a la educación en el centro de las acciones, este próximo sábado, 3 de mayo, a las 11.30 horas, celebraremos en la Casa de la Cultura la segunda edición de Almassora Educa. La jornada contará con la ponencia de la experta en Educación, Rosa María Peris Sirvent, que abordará la educación en la era digital desde diferentes esferas, destacando aspectos tan relevantes como el bienestar emocional, la resiliencia, la satisfacción y el crecimiento personal del individuo.
Recomiendo a todos escuchar atentamente a Rosa María Peris y tomar buena nota de los aprendizajes que nos planteará. Licenciada en Ciencias de la Educación, Máster en Educación y Máster en Asesoramiento Educativo Familiar, Rosa María Peris es responsable académica del área de Títulos Profesionales-Educación en la Universidad en Internet (Unir), profesora, asesora y coach educativa.
En la jornada, se entregarán los reconocimientos a los alumnos de Almassora galardonados con el Premio Extraordinario de Educación Primaria curso 2023-2024. La excelencia educativa en Primaria no se limita a alcanzar altos estándares académicos; implica cultivar un entorno donde cada niño pueda desarrollar sus capacidades y fomentar su curiosidad.
Para lograr esta excelencia, es esencial contar con docentes comprometidos y apasionados, que no solo transmitan conocimientos, sino que también inspiren y guíen a sus alumnos. Además, es fundamental que las familias y la comunidad educativa trabajen de la mano para potenciar el aprendizaje y el bienestar de los niños.
