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El pasado 12 de Mayo, la Dirección General de Salud Pública modificó la declaración de aptitud del agua potable de la playa de Xilxes. Según esta declaración, queda apta para el consumo humano el agua potable de las calles 6 a 13 del Barrio Marítimo, la zona donde se produjo el vertido, así como las de las viviendas que han efectuado el innovador tratamiento con hielo denominado 'ice-pigging'.
Quedaba por resolver tras esa resolución la que se identificó como fase II, es decir, la zona comprendida entre las calles 14 a 16 y parte de la calle Cerezo, que abarca 29 viviendas y el Camping.
El Ayuntamiento propuso modificar el protocolo de actuación en esa zona habida cuenta que, tras el seguimiento analítico y los trabajos efectuados en la zona ya tratada, se pudo constatar que era muy improbable que la contaminación hubiera alcanzado las instalaciones interiores de esas viviendas.
La modificación propuesta, que ha obtenido el visto bueno de la autoridad sanitaria el pasado viernes, consiste en realizar el tratamiento ice-pigging en las redes públicas de la zona restante y un seguimiento analítico exhaustivo durante cuatro meses en cada una de las viviendas de esa zona.
Esta solución, en palabras del alcalde, Vicente Martínez Mus, “es la que pretendían los vecinos de esa zona y que además supone garantizar la vigilancia de la salud sin causar perjuicios innecesarios a los propietarios”.
Quedarán por dirimir las responsabilidades sobre las causas y la asunción de los gastos y perjuicios generados, que están siendo evaluados en sede judicial, pero para el alcalde “es muy positivo que hayamos podido recuperar la práctica normalidad en el servicio sin que los vecinos hayan tenido que sufragar de momento gastos importantes en sus casas“.
