Los principales afectados por las lluvias torrenciales han sido caminos rurales y los daños causados a chalets por la riada del barranco Triador
Juan José Benito / Castellón Información
El Ayuntamiento de Vinaròs ha hecho una valoración de tres millones de euros en daños ocasionados a infraestructuras municipales por el temporal de lluvias torrenciales de los últimos días y pedirá que se declare zona catastrófica. Los principales afectados por las lluvias torrenciales han sido caminos rurales y los daños causados a las playas del Triador y Barbiguera.
A esa cantidad ha de sumarse los daños privados causados por la riada del barranco Triador a diferentes chalets, los cuales ha de valorar el consorcio de seguros.
Asimismo, también se han producido daños en explotaciones agrícolas, así en una finca ha habido una pérdida de unos 300 plantones de cítricos, además de daños en infraestructuras de riego de varias fincas por el agua. También ha habido daños en la antigua Nacional 340 a su paso por el puente del barranco Triador, además de afecciones a los trabajos de ampliación de la Nacional 238.
El presidente de la Diputación, José Martí, se ha trasladado esta mañana a Vinaròs para recorrer la zona del barranco Triador, en la costa norte, junto al alcalde, Guillem Alsina, y la directora territorial de Presidencia de la Generalitat Valenciana en Castellón, Eva Redondo, para comprobar las consecuencias de las fuertes lluvias registradas en el extremo norte del término municipal.
Alsina ha dado cuenta de la primera valoración realizada por los técnicos municipales sobre los daños causados a infraestructuras municipales, sobre todo caminos rurales, y que asciende a unos tres millones de euros, aparte de anunciar que se solicitará la declaración de zona catastrófica.
Llueve sobre mojado
El primer edil apuntaba llueve sobre mojado, ya que muchos de los caminos afectados por estas fuertes lluvias, habían sido reparados hace pocos meses por las afecciones de temporales anteriores, en especial en especial la tempestad Gloria que dejo también graves daños.
Además, el consistorio no puede ahora hacer frente a los gastos que supone la reparación de todas las infraestructuras dañadas, de ahí la solicitud de la zona catastrófica.
Por otro lado, el primer edil apuntaba que la Guardia Civil está investigando la propiedad del vehículo, un Volswagen Golf gris, que fue arrastrado el miércoles por la fuerza de la riada al mar. Al no encontrarse las matriculas se mirará el número de bastidor, ya que actualmente no hay ninguna denuncia de desaparición del vehículo.
Por su parte, Redondo decía que la Generalitat Valenciana convocará en unos días la comisión para tratar la declaración de zona catastrófica, no sólo de Vinaròs sino también de Benicasim, con el fin que los Ayuntamientos tengan acceso a ayudas económicas.
Mientras Martí anuncia que desde la Diputación se aportará la ayuda necesaria para que la zona afectada recupere lo antes posible la normalidad, sin ir más lejos maquinaría de la Diputación estaba limpiando diversos caminos afectados por las lluvias, además de limpiar los puentes de los barrancos Barbiguera y Triador, eliminado áridos y vegetación arrastrados por las riadas.
Asimismo, Martí ha expresado todo el apoyo de la institución provincial, y ha felicitado al CPBC por su respuesta en los sucesos que han “afectado tierra, mar y aire después del incendio de Azuébar y el derrumbe del edificio de Peñíscola”.
