Los trabajos han frenado la regresión y creado nuevas zonas accesibles
Castellón Información
Ya han finalizado las obras de protección de varias zonas de la costa norte que se iniciaron el pasado mes de febrero, con carácter de emergencia. Los trabajos, realizados por la empresa BECSA a través de la Dirección General de Costas, han tenido un coste total de 619.000 euros y han consistido en la construcción de muros de contención, escolleras y pasarelas en cuatro espacios diferenciados: la cala de La Foradada, la zona de la cala El Pastor y de la capilla de la Asunción y la zona de Boverals.
Los concejales de Urbanismo y Ordenación del Territorio, Jan Valls, y Obras y Servicios, Guillem Alsina, han visitado hoy las obras de las que han destacado "cumplen su función de frenar la regresión de la costa en espacios que se encontraban muy afectados y ponían en peligro la seguridad de viviendas y viales, además de crear nuevos espacios accesibles en nuestro litoral".
En el caso de La Foradada, Se ha construido un muro de contención de mampostería y se ha asegurado el espacio, que sufría una erosión que hacía peligrar incluso el vial en la zona superior. Esta obra está ya completamente finalizada y ha tenido un coste de 120.000 euros, con financiación a cargo de la Dirección General de Costas en un 60% -72.000 euros-mientras que el 40% restante -48.000 euros- van a cargo del consistorio. En el resto de actuaciones, la financiación corresponde en su totalidad al gobierno central.
En la cala del Pastor y zona de la capilla de la Asunción se ha construido una pasarela de 220 metros que permitirá el paso entre las distintas calas, al tiempo que permite la protección de las viviendas ubicadas en la zona y que estaban sufriendo desprendimientos provocados por la erosión del mar. Se espera que la obra esté a punto en quince días, a falta tan solo de realizar pruebas de contención en los taludes, que se instale una malla galvanizada y se plante vegetación para embellecer la zona. Además, en esa zona se están realizando trabajos para proteger la escollera ya existente, que permita proteger la playa de forma natural.
En la zona de Boverals se ha actuado sobre dos espacios que presentaban una fuerte erosión en la zona inferior, creando cuevas que ponían en peligro la carretera.
En todos los casos, se han utilizado bloques de piedra de la cantera Ulldecona de más de 7 toneladas. Según la dirección de obra, las principales dificultades, a la hora de la ejecución, ha sido la de habilitar pasos y espacios para facilitar el traslado de maquinaria pesada y materiales. Las actuaciones han posibilitado también la instalación de 740 metros de valla de madera de pino, en todo el recorrido de las calas afectadas por las obras, que aportan mayor seguridad para viandantes y crean miradores.
