Rafa Mezquita/Castellón Información
Vila-real empieza la cuenta atrás para el I Campeonato de Pruebas para las UCAN de la Policia.
El paraje del Termet de la Ermita de la Mare de Déu de Gràcia acogerá el próximo viernes día 13 de Noviembre este encuentro abierto al que podrán asistir todos los ciudadanos que lo deseen con tal de observar las habilidades de la Unidad Canina de las 15 diferentes comisarías de Policía que se darán cita venidas de toda la geografía española. Aunque Vila-real como organizador no podrá participar, el edil de Seguridad Ciudadana, Javier Serralvo ha presentado este curso que “pese a ser el primero, estamos seguros de que vendrán muchos más”. El concejal socialista ha destacado el buen hacer de la Policia Local de Vila-real en materias de formación porque “tras la cátedra y los cursos en máterias de formación, este torneo es un nuevo triunfo de esta comisaría”.
Asimismo, Serralvo explica que “Vila-real es una ciudad de acogida, y queremos englobar todo este tipo de actos dentro de nuestra marca de Ciudad de Ferias y Congresos” como podría suceder próximamente con la Concentración de Policías de Iberoamerica que acogerá la localidad de la Plana Baixa.
Al edil le han acompañado en este acto de presentación, el intendente jefe de la Policia Local, Ramón Martínez y el agente responsable de la UCAN, Juan Mundó.
Precisamente este último indica que “Vila-real es referencia para muchas ciudades y comisarías” porque “tenemos otra forma de hacer policía”.
La prueba
Por lo que al curso respecte, Mundó explica qye “constará de dos partes de 8 minutos”. La primera se procederá a un registro de vehículos en la zona del párking del Termet, y la segunda ocupará el registro de los interiores y exteriores en la zona de la piscina descubirta. En estas pruebas, los canes tendrán que detectar sustancias ocultas. “Es una buena oportunidad para que los perros puedan demostrar sus aptitudes y su forma de resolver los problemas” explica el agente.
Una buena forma de promocionar tanto la cultura plocial , así como para ofrecer Vila-real a la población española y fomentar la economía en un paraje “incomparable” como es el Termet.
