La industria cerámica de la provincia de Castellón y la Generalitat Valenciana se han marcado un plazo de dos años para implantar la industria 4.0, que permitirá digitalizar las líneas de fabricación, conocer en tiempo real los costes de producción, controlar la calidad de materias primas y mejorar los proceso energéticos y de logística. Una apuesta importante para la que el presidente, Ximo Puig ha anunciado esta mañana la subvención de 350.000 euros para este proyecto y la creación de una mesa de diálogo, la "Mesa del Taulell".