Esperanza Molina / Castellón Información
Isabel Bonig y Javier Moliner han reiterado la disposición del PP a realizar una oposición leal y a consensuar los temas fundamentales
Isabel Bonig, presidenta del Partido Popular en la Comunitat Valenciana, Javier Moliner, presidente provincial, y Miguel Barrachina, secretario provincial el Partido en la provincia de Castellón, han mantenido hoy un encuentro informativo con los medios de comunicación. El objetivo del encuentro ha sido: valorar la gestión realizada al frente de las instituciones por los gobiernos, que, sin representar la mayoría en als elecciones, han asumido el mando por las múltiples coaliciones realizadas.
El resumen de esta gestión, desde el punto de vista del PP, se ha caracterizado por laimprovisación, la deslealtad, y la destrucción de los proyectos iniciados anteriormente por el PP, que tenían como objetivo, garantizar la recuperación económica de la Comunitat.
Para el PP, las coaliciones han impuesto los intereses partidistas, por encima de los intereses de los ciudadanos. Acusan además al gobierno de la Generalitat, de gobernar a impulsos de ocurrencias, sin un plan de gobierno sólido, que se formó con el único objetivo de desbancar al PP. Y de realizar una política de gestos, que puede poner en peligro la confianza de los sectores económicos y empresariales.
"Los meses que se van a vivir ahora, antes de las elecciones nacionales, indicaba Javier Moliner, serán decisivas para todo el país, porque aquí no se juega el futuro del PP, sino el de todo el país, con el riesgo de que las coaliciones tiren por la borda todos los resultados conseguidos hasta el momento, cuyo ejemplo ha sido evidente en Grecia".
El Partido Popular, afirmaron tanto Bonig como Moliner, asume los resultados electorales, y está dispuesto a presentar una oposición responsable ante la sociedad. "Frente al gobierno tripartito de las ocurrencias, nosotros como partido, preferimos hacer que contar", indicó Javier Moliner.
Y es que, como afirmaron ambos dirigentes del Partido Popular, están dispuestos a plantear una oposición que defienda los intereses de los ciudadanos, pero también con capacidad de reconvertirse desde dentro, con nuevas caras y una mayor democracia interna.
En lo que concierne al gobierno de la Generalitat, Isabel Bonig valoraba los dos últimos meses y medio como un gobierno vacío. "En 110 días el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, no ha comparecido para dar cuentas ante las Cortes Valencianas. Ha preferido esconderse detrás de sus concelleres".
"Su gestión, añadió la presidenta del PP, se ha basado en dos objetivos: tirar al PP de los puestos de gobierno, y destruir todos los proyectos gestionados por el Partido Popular para la Comunitat Valenciana. No se ha presentado ni un nuevo proyecto. Lo único que han hecho hasta ahora ha sido quejarse y llorar".
El Partido Popular ha pedido lealtad a los nuevos gobiernos. Lealtad y trabajo por los ciudadanos, así como más sentido común para que su política de gestos y no de contenidos no sea contraria a los intereses de los valencianos.
En este sentido, Bonig ponían como ejemplos de mala gestión, la reunión del Ayuntamiento de Alicante con Ikea, que se vino abajo porque el ayuntamiento tenía más interés en la fotografía que en la negociación. Ikea ha planteado la posibilidad de trasladarse a Benidorm, dijo Bonig, y eso sería desastroso para Alicante. "Primero hay que gestionar, y son muchas horas de trabajo antes del momento de hacerse la fotografía".
En Valencia, Bonig ha cuestionado el vacío y la falta de gestión que actualmente tienenparalizada una inversión de 61 millones en el desarrollo de la Marina Real.
En cuanto a Castellón, ha criticado la disposición del Ayuntamiento en torno al Corredor Mediterráneo, y sus críticas a la reducción del transporte y sus soluciones mientras se producen als obras, por considerarlo inconsecuente. "si las obras de un proyecto tan importante tienen que interrumpir los tráficos, es molesto pero también necesario. El Ayuntamiento debería de negociar, pero de verdad, en lugar de quejarse continuamente".
Isabel Bonig puso otros ejemplos de gestión, que entiende como malintencionada. Este ha sido el caso del Tram cuyo trazado afirmaron la consellera y alcaldesa se modificará por los datos obtenidos. "¿Qué datos?. Es imposible que los tengan todavía".
Pero lo más grave, ha indicado Bonig, es que las coaliciones, no acaban de ponerse de acuerdo en su reparto de cargos, como es el caso en medio ambiente, y eso ha provocado quemuchos proyectos presentados se devuelvan y no se gestionen, y en consecuencia , la queja de los empresarios.
El Partido Popular ha denunciado también los incumplimientos de las promesas realizadas por el gobierno de coalición de la Generalitat con respecto a los colegios: se han mantenido los mismos ratios que antes. Los 26 colegios en proyecto son los mismos que ya se habían impulsado, no han reducido las tasas universitarias; n han incrementado la becas, y no han pagado la deuda con las universidades, pese a que disponían de remanente suficiente para ello.
En otro estado de cosas, los populares han denunciado la actitud sectaria y desleal del nuevo gobierno, que se ha puesto de manifiesto en los consejos de administración de los puertos de Castellón y Alicante, cuya gestión se ha politizado, cuando se debería haber optado por un gobierno técnico que no cndicione su futuro.
En lo que concierne al aeropuerto de Castellón, tanto Bonig como Moliner afirmaron, que se trata de una oportunidad única que Castellón debe aprovechar. Lo malo en este caso, indicaron, son las hemerotecas y el buscador de google, donde siguen figurando todas las críticas de los actuales gestores políticos hacia esta infraestructura. Deberían pedir perdón públicamente por todo cuanto hicieron y dijeron.
En torno a su financiación y a la investigación de la Unión Europea, Bonig y Moliner indicaron que todos los aeropuertos españoles, salvo el Altet o el de Mallorca generan pérdidasque son sufragas por AENA, y por tanto por fondos públicos. Si se investiga que se haga con todos. Pero ahora no vale quejarse por parte de la Generalitat, cuando fueron precisamente ellos los que llevaron este tema a Europa.
Finalmente Moliner defendió el papel de las diputaciones que ahora resulta prioritario como medio de financiación de los proyectos de la Generalitat; y Bonig reflexionó sobre la elección del presidente de la diputación de Valencia, que tiene todas las cartas para convertirse en el principal competidor de Puig. "Puig se ha rodeado de todo lo que fue el núcleo duro de Lerma, pero el Psoe tiene también gente nueva y gente joven y habrá que ver cómo evolucionan las cosas".
















































