La Coordinadora Feminista congrega a 300 personas en el exterior de la Llotja del Cànem un acto reivindicativo bajo el lema ‘Ni un pas enrere’
Una treintena de asociaciones de la provincia, así como partidos políticos, sindicatos y sociedad civil se han reunido en la tarde del martes en el exterior en la Llotja del Cànem de Castelló para reivindicar el derecho a la igualdad real entre hombres y mujeres, el respeto a la diversidad sexual y a la memoria histórica o la promoción del uso del valenciano, entre otros. Por la afluencia de gente el acto se ha realizado en la calle en vez de en el interior de la Llotja.
Nueva movilización en la ciudad de Castelló tras las elecciones del 28M, que han dejado pactos con la ultraderecha en muchas provincias del territorio nacional, y cara a las generales del próximo 23J, en las que este escenario político podría replicarse. Ante esta situación de "emergencia democrática", tal y como la califican desde la Coordinadora Feminista de Castelló, la entidad ha congregado a unos 300 castellonenses para gritar alto y claro que no van a dar "ni un pas enrere".
Más de una treintena de asociaciones de la provincia, así como partidos políticos, sindicatos y sociedad civil se han congregado en el interior de la Llotja del Cànem, un espacio (esta vez interior) escogido debido a altas temperaturas que estos días azotan la capital de La Plana. Allí, representantes de la coordinadora han leído un manifiesto en el que han reivindicado el derecho a la igualdad real entre hombres y mujeres, el respeto a la diversidad sexual y a la memoria histórica, la promoción del uso del valenciano, la libertad de expresión y el derecho a una vivienda digna, entre otras. Todo ello después de que tras los nuevos pactos de gobierno la ultraderecha haya vetado, en algunos ayuntamientos de la provincia de Castellón, la bandera LGTBI, haya negado la violencia machista e, incluso, prohibido algunas revistas en bibliotecas públicas por fomentar el uso del valenciano.
En este sentido, han manifestado que "la incorporación de la ultraderecha en los pactos de gobierno supone la negación de la violencia machista y cuestiona el derecho de las mujeres a su propio cuerpo (salud sexual y reproductiva, incluido el aborto). El desprecio a los derechos de las personas LGTBIQ+ y la homofobia con la retirada de banderas, la censura a las manifestaciones culturales y el veto en las publicaciones en nuestra lengua, el negacionismo del cambio climático, las afirmaciones racistas y xenófobas suponen un cambio de paradigma político rompe las reglas del juego democrático de la convivencia y atenta contra los derechos humanos".
Desde la Coordinadora Feminista han subrayado que "no queremos vivir con miedo ni volver a tiempos oscuros, sino defender lo que hemos conseguido, que nos ha costado mucho. Y eso haremos: seguiremos reivindicando". En este sentido, con las elecciones generales a la vuelta de la esquina, han aprovechado esta concentración para pedir a la sociedad "que no se quede en casa el 23J y salga a votar".
Tras la lectura del manifiesto, el acto ha continuado con la exposición de un decálogo (consensuado y compartido en todo el territorio valenciano) en el que diferentes asociaciones han reclamado y exigido a los políticos que no den un paso atrás en los derechos conseguidos.
Aportaciones de las asociaciones de la provincia
Asimismo, en el acto han participado diversas asociaciones, como los Yayoflautas, Asamblea 8M, Castelló LGTBI, ONG Gnanou, Escola Valenciana, Associació Cultural Socarrats de Vila-real, Plataforma per la Llengua, ACPV, Salud Mental Castelló, Castelló en Bici, Coordinadora No a la MAT, Ciutat Feliç, Nitrofoska Almenara, ProArt Castelló, La Trenza Colectivo Migrante Antiracista, CCOO, Intersindical, UGT, Asociación de Profesionales del Diseño La Exprimidora, CERAI, la Plataforma Castelló per la Justícia y Contra la Corrupció y Arvase-Arbrat Vall de Segó.
Todas ellas han aprovechado el acto para trasladar a los nuevos gobiernos sus reclamas y necesidades y han dejado claro que seguirán "luchando para no perder ninguno de los avances conseguidos". Porque "no vamos a dar ni un paso atrás por nuestros derechos".
