Wences Alós Valls explica que el objetivo de esta actuación es ser un municipio cada vez más respetuoso con el medio ambiente y más sostenible
El Ayuntamiento de Moncofa ha dado otro importante paso en su esfuerzo para fomentar el reciclaje y ser un municipio cada vez más sostenible. De esta forma, el equipo de Gobierno ha procedido ya a la instalación de 10 nuevas islas de recogida selectiva de residuos, que refuerza las que ya existían, además del ecoparque. La instalación de 10 nuevas islas de reciclaje que supondrán un incremento del 30 % ya que la cifra total pasará de 32 a 42. Pero el incremento será aún mayor ya que en el mes de octubre se espera la llegada de otras 20 islas de reciclaje lo que supondrá un incremento de casi el 100 % pasando de 32 islas a principio de año a 62.
Wences Alós Valls, alcalde de Moncofa, ha asegurado que “con esta medida puesta ya en marcha, pretendemos potenciar la recogida selectiva de residuos urbanos en todo el casco urbano y la playa y así favorecer la gestión correcta de nuestros residuos urbanos. Ya dijimos que queríamos que Moncofa fuese un municipio cada vez más respetuoso con el medio ambiente y más sostenible, y ello pasa necesariamente por facilitar a nuestros vecinos que puedan reciclar sus residuos caseros”.
La recogida selectiva define el proceso de separación de los residuos sólidos urbanos y su depósito en diferentes contenedores para que sean recogidos y posteriormente reciclados. Para la recogida selectiva es fundamental la colaboración ciudadana, ya que los vecinos deben separar los residuos aprovechables del resto de los residuos y los depositan en los contenedores apropiados.
En estos momentos ya se han instalado los contenedores de cartón y envases y según Pedro Sales, concejal de medio ambiente, “en breve la empresa Ecovidrio procederá a la instalación de los contenedores de vidrio”.
Recordemos que los residuos de cristal que se generan en el municipio pasaron a ser recogidos por Ecovidrio, que es una empresa de capital público a cambio de los beneficios que pueden obtener por el tratamiento del cristal reciclado. Esta medida supuso un ahorro de 10.000 euros con el objetivo de mejorar la gestión y la eficiencia.
