La suma de las lluvias, el agua y las temperaturas, una combinación explosiva. Por primera vez en años Diputación realizó una fumigación aérea en Castellón
Los mosquitos proliferan a millones en las zonas de la marjal de la provincia de Castellón. Ha sido el resultado de las fuertes lluvias de este mes de octubre sumada al ascenso de las temperaturas, y la inundación de áreas más bajas del litoral, donde es difícil que la tierra drene todo el caudal acumulado.
Aunque es una situación generalizada en todas las zonas de marjal, en el término municipal de Castellón los vecinos se quejan y denuncian continuamente que "no pueden salir ni a tender la ropa".
Y es que, además de la lluvia y la temperatura, se da la circunstancia de que estas zonas bajas de Castellón no consiguen dar salida a toda el agua empantanada por las sucesivas lluvias de los últimos meses.
Cabe recordar, que no se trata solo del momento en el que se produce la tormenta, que en la provincia han sido fuertes; es que, pasado el chaparrón, las precipitaciones de las zonas más altas y situadas más al norte derivan por gravedad hacia estos lugares que tienen un nivel freático más alto y una cota más baja.
Fuentes de la Marjalería de Castellón señalaban que hacía muchos años que no se habían producido las afloraciones de agua en los denominados ‘ullals’ como ocurre este año. Las acequias bajan llenas, se desbordan; si el viento sopla de Levante es el agua del mar el que impide que los cauces desagüen, e incluso el agua salada se mete dentro. Es lo que tiene la Marjalería de Castellón.
Según indicaba el concejal Sergio Toledo, se han multiplicado las actuaciones de la empresa contratada por el ayuntamiento, para el tratamiento de larvas de mosquitos en diferentes puntos de la Marjalería. Además, incluso la Diputación ha contratado un vuelo de fumigación que actuó sobre estas zonas… y hacía años que no se utilizaban estos métodos para evitar la proliferación de los mosquitos.
Por otra parte, y aunque se fumigan cauces y acequias, los medios contratados solo pueden realizar los tratamientos en los entornos de las zonas de titularidad privada.
Por lo pronto, los ciclos de eclosión son de 12 días, por lo que se estaría en el momento más difícil… ahora solo resta esperar que bajen las temperaturas y no se produzcan nuevos episodios de lluvias torrenciales.
