El Grupo Municipal Popular denuncia que el 16% de lo recaudado se ha quedado en el cajón del superávit
EM/Castellón Información
El Grupo Municipal Popular ha analizado la gestión económica de los 2 años del bipartito. La portavoz popular, Begoña Carrasco, acompañada del portavoz adjunto, Juan José Pérez Macián, y el concejal popular, Carlos Feliu –encargado del área de Hacienda- han criticado los triunfalismos del Pacte del Frau, que dicen, se dedica a recaudar más pero no a invertir en la ciudad.
La crítica efectuada se basa en los informes relativos a la liquidación del presupuesto del 2016, donde se recogen tanto las previsiones iniciales, como la ejecución final de los distintos apartados.
De esta forma, indicaba Carlos Feliu, una cosa es lo que se presupuesta como ingresos y otra lo que de verdad se recauda; y de la misma forma, una cosa es lo que se proyecta gastar y otra muy diferente lo que finalmente se ejecuta.
Y en este aspecto, indicaron los concejales del Grupo Municipal Popular, lo más funesto es que el Ayuntamiento se negó a rebajar los impuestos, tal como se lo solicitó el PP, pero llegan al final de este presupuesto con un superávit de 25,5 millones. Un superávit que no es un triunfo, sino una muestra de mala gestión, porque no han podido o sabido llevar adelante los proyectos que programaron para la ciudad.
Por lo tanto, para generar superávit en un cajón hubieran podido recaudar menos y presionar menos fiscalmente a los ciudadanos.
Tal como indicaron:
“Los índices de la Intervención, basados en la liquidación de los 3 últimos ejercicios, confirman que en 2016 cada castellonense pagó en impuestos 21 euros más que el año anterior, sin que redundara en mejoras para el ciudadano”.
La portavoz popular, Begoña Carrasco, ha manifestado: “Presumen de su superávit pero éste no significa buena gestión, porque recaudan más pero no ejecutan, el resultado son 28 millones sin gastar. No puede ser que el 16% de los ingresos hayan quedado pendientes. Para eso, mejor no subir los impuestos a la ciudadanía porque el bipartito es incapaz de reinvertirlos en la ciudad”.
“El Pacte del Frau, indicó, sólo sabe subir los impuestos para gastar más en personal y subvenciones, mientras la ciudad está paralizada. Marco es incapaz de invertir en la ciudad lo que con impuestos recauda a los castellonenses”.
En 2016 para gestionar 1,12 millones de euros más de gasto corriente, el bipartito necesitó 1,34 millones más en personal. “Su gestión no se caracteriza precisamente por la eficiencia. Con el Pacte del Frau no salvan personas (gasto corriente), salvan a sus amigos (dedazos)”, apunta Feliu.
Cabe recordar, mencionó, que la alcaldesa se rodea de 18 personas de confianza, que cuestan al año 765.000 euros.
Los mimos informes, declararon, revelan que con el Pacte del Frau, el aumento del gasto del Ayuntamiento no va con cargo a otras administraciones, sino que lo pagan los castellonenses con sus propios impuestos municipales.
Feliu: “La incapacidad reivindicativa de Marco ante otras administraciones, como la Generalitat Valenciana, hace que quienes acaben pagando la ineficiencia de Marco sean los castellonenses, que ven subir sus impuestos. Obras de competencia autonómica acaban por financiarse con presupuesto municipal”.
