El grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Castelló ha denunciado "la decisión unilateral de la alcaldesa, Begoña Carrasco, y sin ninguna clase de explicación al vecindario, de bloquear los accesos que se habilitaron al barrio de Mestrets gracias a la remodelación de la avenida Castell Vell que impulsó el anterior gobierno progresista".
El portavoz adjunto socialista López ha trasladado este lunes en la Comisión de Estudio Permanente de Urbanismo y Servicios Públicos "la indignación de los vecinos y vecinas de la zona, porque se han encontrado de la noche a la mañana con la colocación de unos bolardos que les impiden utilizar el camino Mestrets, adecuado y asfaltado tal y como nos comprometimos con ellos".
López asegura que el concejal de Urbanismo y Servicios Públicos, Sergio Toledo, "parece que se ría de los vecinos y vecinas, porque el pasado 23 de agosto se vanagloriaba de la que la ciudad contase con una zona más urbana y accesible 'que agradecerán los vecinos' y ahora vemos como, sin explicación alguna, cortan un acceso que estaban utilizando a diario los vecinos de Mestrets y parte de la comunidad educativa que acude al colegio Columbretes".
El portavoz adjunto socialista, en este sentido, recalca que "nada nos sorprende del gobierno de la derecha y la ultraderecha, que son profesionales de aplicar el rodillo y de pasar por encima de todo el mundo, incluso de las actuaciones consensuadas con ellos para mejorar su calidad de vida".
José Luis López, además, ha denunciado "la falta de limpieza del barrio, donde cualquiera puede ver la acumulación de vertidos sin que el equipo de gobierno del PP y Vox se dé por enterado de que los barrios de Castelló necesitan atención diaria".
Las obras de remodelación y urbanización de la avenida Castell Vell, que comenzaron en diciembre del año pasado, culminaron de la mano del anterior equipo de gobierno liderado por el PSPV y han permitido mejorar la accesibilidad de esta arteria de la ciudad e impulsar la movilidad sostenible. Con un presupuesto de 1,4 millones de euros, "la meta era convertir la zona en un espacio más sostenible y humano al dar más protagonismo a las personas viandantes y dotarla de un nuevo carril bici".
Junto a ello, la obra ha supuesto la renovación del pavimento asfáltico y la mejora del alumbrado público, así como la señalización viaria existente, además de una mejora importante con la implantación de una nueva rotonda en la intersección de la avenida Castell Vell con la cuadra Borriolenc y la avenida Diputación para dar más seguridad a vehículos, ciclistas y peatones.
