FICHA TÉCNICA:
-70- ESPAÑA: Rudy Fernández (11), Calderón (16), Riky Rubio (-), Víctor Claver (2) y Marc Gasol (14) -cinco inicial-, Pablo Aguilar (5), Sergio Rodríguez (9), Rey (2), San Emeterio (2), Sergi Llull (4), Germán Gabriel (-), Alberto Corbacho (-) y Álex Mumbrú (3).
-66- POLONIA: Lampe (13), Zamojski (5), Koszarek (2), Ignerski (12) y Kelati (8) -cinco inicial-, Chylinski (6), Szubarga (4), Ponitka (4), Kuling (3), Waczynsky (3) y Hrycanick (-).
PARCIALES: 21-13, 10-22 (descanso), 14-14 y 25-17.
PABELLÓN: Ciutat de Castelló, ante unos 5.500 espectadores. Prácticamente lleno.
La selección española arregló en el último cuarto los problemas de defensa y anotación que encontró durante gran parte del partido.
España inició el camino de preparación para el Europeo de Eslovenia (en septiembre) en Castellón ante Polonia y lo cierto es que la selección dirigida por el técnico castellonense debutante Juan Antonio Orenga tuvo más problemas de los previsto para imponerse debido al movido segundo cuarto del partido donde los polacos le sacaron los colores con un parcial de 10-22. Luego reaccionó la ÑBA y acabó sumando el triunfo por 70-66.
Era el primer test del combinado español, de ahí que en un partido inconstante, con combinaciones de buenos detalles y de otros menos buenos, por momento se le notara falto de rodaje. Polonia, más rodado, fue por delante en el marcador durante muchos minutos. El primer cuarto fue para España. Igualdad de inicio y luego despegue en el marcador para los de Orenga, que con un triple de Álex Mumbrú (19-11) se escapó en el marcador. Acabó ese período con un claro 21-13.
En los segundos diez minutos de partido, sucedió de todo. De inicio un parcial de 0-9 para los polacos que situaron el 21-22 en el marcador a los cinco minutos. Tras unas idas y venidas. Un triple de Rudy Fernández puso el 29-27 a dos minutos y medio para el descanso, aunque entre los triples del rival y la pocas seguridad bajo los aros hizo que Polonia se marchara al descanso con un 31-35, es decir, un parcial de 10-22.
Tras el intermedio, España intentó sacar el genio. La furia. Los muchachos de Juan Antonio Orenga se acercaron poco a poco en el marcador (42-44), aunque se fallaba demasiado desde el exterior, triples y canastas aparentemente muy fáciles. El público, deseoso de la reacción definitiva, aplaudía las acciones de 'La Roja'. No hubo tal reacción y se llegó al minuto 30 con parcial igualado (14-14), pero en el cómputo general los españoles seguían por detrás en el marcador: 45-49.
Así que tocaba jugárselo todo a una carta en los diez últimos minutos. Y la verdad es que llevados en volandas España se transformó en un huracán que se creció y se llevó por delante al equipo polaco. Con un triple de Calderón a 7:15 se puso el 52-54, y poco después una canasta de Sergio Rodríguez niveló el marcador (54-54). Luego llegó el 56-54. Se desinfló el globo con el 56-58. Pero volvió a sacar la casta y la garra. Se remontó y con un 'triplazo' de Pablo Aguilar a falta de cuatro minutos puso un esperanzador 62-57 en el marcador. De ahí al final se controló la situación hasta el bocinazo final que dejó el marcador en 70-66.
