El ente provincial ha aprobado las nuevas cuentas en el pleno extraordinario de este martes que ha estado marcado por las críticas de PSOE, Compromís y también de Vox
La Diputación de Castellón ha aprobado este martes, en un pleno de carácter extraordinario, el presupuesto provincial para 2026, unas cuentas dotadas con más de 216 millones de euros y presentadas bajo el lema ‘Més que mai’. El documento ha salido adelante con los votos a favor del PP, las abstenciones de PSOE y Vox y el voto en contra de Compromís, en un debate marcado por las críticas de la oposición, que ha cuestionado tanto el modelo presupuestario del equipo de gobierno como su capacidad de diálogo.
Al finalizar la sesión, la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, ha defendido que el nuevo presupuesto “demuestra que este equipo trabaja sin descanso y que es capaz de llevar a cabo, en este plan de estabilidad financiera, un presupuesto que da respuesta a las necesidades de los municipios”. Sin embargo, esta premisa no fue compartida por los grupos de la izquierda ni por Vox.
Samuel Falomir (PSOE): “El PP no tiene proyecto de futuro”
Desde el PSOE, el diputado Samuel Falomir ha revelado que “este no es el presupuesto que marca el rumbo de la provincia y demuestra que el PP no tiene proyecto de futuro”. Según ha explicado, las cuentas “no abordan los problemas estructurales de la provincia ni anticipan los retos que vienen”, además de ser “900.000 euros inferiores a las del año pasado, pese a que la Diputación ingresará 5 millones más del Gobierno central”.
En este sentido, Falomir ha acusado al equipo de gobierno de “no ser capaz de pedir subvenciones a otras administraciones”, de “haber dejado perder ayudas” y de mantener “una actitud de desprecio sistemático hacia la oposición”. A su juicio, el presupuesto está “al dictado de Vox”, con “recortes en igualdad, memoria democrática y cooperación internacional”, y evidencia que es “un proyecto ideológico, de retroceso e involución”. “Es un instrumento partidista”, concluyó.
David Guardiola (Compromís): “Evidencia un fin de ciclo y hace necesaria una alternativa”
Desde Compromís, el diputado David Guardiola ha calificado las cuentas como “un proyecto agotado, sin ambición y con el principio de fin de ciclo”. Según ha afirmado, el PP “inicia su final político con puertas cerradas al diálogo”, limitándose a reuniones “estéticas” con la oposición. Guardiola ha reprochado que la Diputación es “la única institución que deja de lado la cooperación internacional”, y ha lamentado que se considere “una carta a los Reyes Magos” la línea de subvenciones que propone su grupo.
A su juicio, el lema ‘Més que mai’ debería ser ‘Més mal que mai’, porque “olvida problemas clave de la provincia, como la vivienda o el apoyo a la industria”. “Evidencia un fin de ciclo y hace más necesaria que nunca una alternativa”, sostuvo.
Luciano Ferrer (Vox): “Habría que revisar las subvenciones a ONG y reducir el gasto en igualdad”
Por su parte, Vox expresó una posición crítica pese a abstenerse. El diputado Luciano Ferrer ha asegurado que se trata de un presupuesto “con muchas dudas”, que podría mejorarse mediante “un uso más eficiente del dinero público”, reduciendo partidas de publicidad, protocolo o subvenciones a asociaciones “sin impacto en la provincia”.
Ferrer ha reclamado “sanear cada euro” y “revisar subvenciones a ONG que fomentan la inmigración ilegal”, así como “reducir el gasto en igualdad”. Además, ha considerado insuficientes las inversiones para combatir la despoblación, así como las destinadas a agricultura y pesca. “No aportan nuevas soluciones ni tienen capacidad de mejora. Son muy técnicos, pero no sé si son los que nuestros vecinos necesitan”, ha afirmado.
Héctor Folgado (PP): “Mientras unos paralizan el país, nosotros ponemos en marcha un presupuesto”
En defensa del presupuesto, el portavoz del PP, Héctor Folgado, ha asegurado que “es una herramienta fundamental para transformar la vida de los vecinos y sus pueblos”, ya que “cuando los municipios avanzan, la provincia avanza”. En este sentido, ha subrayado que las cuentas “nacen de la convicción de estar al lado de los 135 municipios”, elaboradas tras “visitar y escuchar a alcaldes y alcaldesas”.
Sobre las propuestas de la oposición, Folgado ha criticado que algunas fueran “poco realistas y desconectadas de las necesidades de los pueblos”, y ha acusado a Compromís de ser una oposición “desmemoriada” y de “faltar a su palabra”. “Hacen más una oposición de ChatGPT que de pisar el territorio”. Asimismo, el diputado popular ha aprovechado la sesión plenaria para reivindicar la aprobación del presupuesto como un ejercicio de estabilidad en un contexto nacional de incertidumbre: “Mientras unos paralizan el país, nosotros ponemos en marcha un presupuesto que garantiza que nadie se quede atrás”.
En este sentido, Folgado ha recordado que, por primera vez, “las cuentas incluyen la carrera profesional del personal de la Diputación, una reivindicación histórica”, y ha defendido que el presupuesto responde a la “negación de financiación por parte del Gobierno de España”, lo que obliga a la institución a priorizar las transferencias para que los ayuntamientos dispongan “antes que nunca” de los fondos de cooperación. “Nos hubiera gustado disponer de inversiones más espectaculares, pero esta situación nos obliga a reforzar a los municipios, porque el Gobierno los ha olvidado”. “La Diputación será siempre la casa grande de los pueblos”, ha concluido.

















































