Trenco cuestiona las inversiones culturales en el castillo de Peñíscola, y CseM ofrece su voto a cambio de una Comisión de Investigación
Pleno largo en la Diputación Provincial, en la que pese a los esfuerzos no se logró consensuar la moción contra la despoblación, las críticas del PSOE se convirtieron en abstención mientras el diputado de CseM ofreció su voto a cambio de una Comisión de Investigación sobre purines. Unanimidad con la propuesta del PSOE para reclamar infraestructuras hídricas en Els Ports, y Compromís volvió a cuestionar las inversiones culturales en el castillo de Peñíscola, donde dijo, “los turistas solo quieren playa”
Esperanza Molina / Castellón Información
El pleno de la Diputación Provincial de Castellón comenzó con la celebración del nombramiento del nuevo diputado de Compromís, el benicense Pau Ferrando, que apenas tardó 45 segundos en tomar posesión, arropado por compañeros y familiares.
Recursos hídricos en la comarca de Els Ports
Importante fue la aprobación por unanimidad de la moción presentada por el Grupo Socialista, para solicitar al Gobierno que consigne un presupuesto de 22,1 millones de euros con los que acometer las infraestructuras necesarias para garantizar los recursos hídricos en la comarca de Els Ports. También esta solicitud se coordina perfectamente con Repoblem, ya que tener garantizado el suministro de agua es fundamental para consolidar la población.
Esta petición se produce como consecuencia del acuerdo histórico logrado por Javier Moliner para que la Confederación Hidrográfica del Ebro reconozca el derecho del norte de Castellón a recibir 10 hectómetros cúbicos. Esta solicitud concreta que esta inversión es para la construcción de cuatro balsas de almacenamiento tanto en el norte de Castellón como en su límite con la provincia de Teruel.
“Usted me dijo antes”
Pero a partir de entonces, la sesión fue una prolongación de: “usted me dijo antes” en la que los portavoces de uno u otro grupo ignoraban los puntos que se debatían o explicaban y aprovechaban sus tiempos para acusar y desmentir afirmaciones de los turnos de debate anteriores.
Inversiones culturales en el castillo de Peñíscola
Tema curioso fue la moción presentada por el Grupo Compromís sobre la regulación de la petición de espectáculos a los municipios, que patrocina la Diputación.
Según el portavoz de Compromís, la Diputación no regula de forma objetiva estas subvenciones, y dedica lo mejor de su dinero a las ermitas y el patrimonio de los ayuntamientos gobernados por el PP. Xavier Trenco fue especialmente incisivo con las dotaciones culturales al castillo de Peñíscola, que una vez más volvió a criticar por activa y por pasiva, ante al cara de pocos amigos que le ponía el vicepresidente y alcalde de esta localidad, Andrés Martínez.
El portavoz del PSOE, José Benlloch, no contribuyó a apaciguar los ánimos y aprovechó su intervención para desdecir al responsable económico sobre su dación de cuentas, los pagos e impagos que realiza la institución. Desde su bancada, Aguilella pegó un salto y sus compañeros tuvieron que sujetarlo.
Una vez que se centró en el tema que se debatía también Benlloch acusó al PP de privilegiar a los suyos.
Por parte del PP, el vicepresidente Vicent Sales intentó aclarar las cosas. En primer lugar reconoció que la Diputación reserva una cantidad para primar la celebración de actos culturales en la provincia, que se conceden en función de una serie de condiciones: que estén favorecidas todas las comarcas, y que no repita el mismo municipio año tras año. Defendió también las inversiones culturales de Peñíscola, porque generan un retorno publicitario e informativo que representa a toda la provincia.
Y ya puesto a explicar privilegios, enumeró dónde han ido a parar las aportaciones culturales que, precisamente en este ejercicio, dijo, han beneficiado a localidades gobernadas por PSOE y Compromís, con la sola excepción del programa Camins del Penyagolosa…
Pero el diputado de Compromís no quedó convencido, y volvió sobre su fijación en el castillo de Peñíscola, porque, indicó, “al fin y al cabo, los turistas solo buscan sol y playa, Peñíscola no necesita más”.
Si Trenco se había pasado de frenada, el portavoz del PSOE, José Benlloch fue mucho más hábil, al acusar a Diputación de invertir en un castillo, el de Peñíscola, que pertenece al Estado y no a la Diputación.
Como fuera que las aguas se habían salido de su cauce, Sales cerró los turnos de debate y réplica: “Me sorprende, dijo dirigiéndose a Trenco, que piense de verdad que los turistas solo vengan a Castellón a ponerse rojos como gambas”, para abundar sobre los valores culturales que diferencian a Castellón de otros destinos turísticos.
Cajeros accesibles
Se aprobó por mayoría la propuesta de Ciudadanos para que se instalen más cajeros accesibles en las poblaciones del interior. Medida que Compromís consideró innecesaria, ya que “las personas mayores que yo conozco no saben lo que es un cajero”; y Benlloch, del PSOE calificó de oportunista.
Petición al Consell para que reduzca su discriminación contra Castellón
El punto nº 9 de Despacho Extraordinario, era una moción del Grupo Popular que pedía “la necesidad de ejecutar los acuerdos adoptados en Les Corts Valencianas y la totalidad del presupuesto de la Comunitat Valenciana”.
Era polémico. El vicepresidente Sales, del PP, aprovechó para poner sobre la mesa todas las virtudes del Gobierno del PP y las nuevas dotaciones económicas que se han concedido desde el Estado a la Generalitat Valenciana, al tiempo que acusó al Gobierno de la Comunitat de discriminar a la provincia.
Castelló en Moviment anunció su abstención por entender que desde su punto de vista, la Diputación no debiera ser lo que es y que esta polémica debería centrarse sobre los ayuntamientos.
Xavier Trenco, de Compromís, salió en defensa de su grupo y su Gobierno Valenciano. Acusó al PP de haber dejado endeudada a la Generalitat y al Estado de infrafinanciar la Comunitat, y ya metido en un aire de sinceridad, llegó a exclamar: “¡Claro que nos gustaría hacer o inaugurar carreteras, pero con lo que ustedes nos han dejado, solo podemos inaugurar carriles bici!”.
Cristina Fernández, de Ciudadanos, se sumó a la moción del PP, afirmó que su grupo vota lo mismo aquí que en Madrid, y acusó a su vez a Compromís de no haber aprovechado su posición en Madrid para lograr mayores ventajas para la Comunitat Valenciana.
Y José Benlloch, del PSOE calificó la moción del PP de “Moción vacuna” o “moción chiste” para echarse a reír si no fuera para llorar; y es que, según explicó Benlloch, de lo que presume ahora el PP de darle a La Comunitat Valenciana, parte se debe a la liquidación de los Presupuestos del Estado del 2015, es decir, que regalar no regalan nada; y la otra cantidad que el PP presume de regalo, pertenece a las dotaciones de 2017.
Y dicho esto acusó a Diputación de Castellón de guardar 15 millones de remanente en el banco, cuando podría hacer más por la provincia.
Lo más llamativo de todo este cruce de palabras, la pregunta de la diputada de Ciudadanos a Compromís: “¿Qué han conseguido ustedes para la Comunitat Valenciana en Madrid?”. A lo que el diputado de Compromís alegó: “Dignitat”.
Moción para afrontar la despoblación de los pueblos rurales
Con este ambiente de base, y todas las acusaciones cruzadas sobre la mesa, llegó el último punto que presumía de ser importante: la moción presentada por el Grupo Popular sobre “la despoblación en los pueblos rurales”. Se presentó una enmienda de adición de Ciudadanos y otra de modificación de Compromís. Ambas fueron aceptadas y por tanto, el consenso con estas fuerzas estaba asegurado.
Pero faltaba Castelló en Moviment y PSOE.
En lo que concierne a Castelló en Moviment, el diputado Ignacio Vallejo defendió la lucha contra la despoblación. Indicó después que “no todo es gratis”, y añadió la oferta de dar su voto a cambio de que la Diputación abriera una investigación sobre la granja de Purines de Vall d´Alba.
Sales no recogió el guante: “Esto no es un zoco de Marrakech, de tu me das cremita y yo te doy cremita. vote usted lo que crea en conciencia”
Y en cuanto al PSOE, a estas alturas de la sesión, Benlloch estaba encendido. “¿Cree usted que el problema de la despoblación se puede solucionar en una mañana y tres conferencias?”
Visiblemente molesto, Javier Moliner intervino para alegar que posiblemente hacen falta muchas soluciones y muchas alternativas, pero lo importante es hacer algo. “A mi si que me preocupan esos congresos”, para acusar a Benlloch de no haberse leído todos los papeles ni los documentos que previamente se habían pasado por Comisión: “No se columpie, mire los datos, mire los papeles, que se ha quedado colgando de la brocha”.
Moliner señaló entonces, que la Federación de Municipios y Provincias va a tomar cartas en el tema de la despoblación y le ha solicitado una ponencia por los trabajos realizados en Castellón, para analizar qué es lo que se puede hacer desde los presupuestos públicos para frenar esa despoblación. “Es que a lo mejor no somos los tontos de la clase. Y eso no quiere decir que no tengamos las puertas abiertas para mejorar todo lo que se pueda, y me preocupa esta cuestión, y que únicamente por su narcisismo el PSOE vaya a votar que no”.
Votaron a favor PP, Ciudadanos y Compromís. En contra, Castelló en Moviment; el PSOE se abstuvo.
Objetivos de la moción
La moción aprobada por Diputación insta a la Unión Europea, al Gobierno y a la Generalitat a que aumenten sus inversiones encaminadas a combatir el envejecimiento y la despoblación en las zonas rurales de la provincia. El objetivo es que apliquen una discriminación positiva, dotando de más recursos y mayor capacidad administrativa a los gobiernos provinciales, que son los que están actuando de forma más eficiente contra este grave problema.
La Diputación ya ha impulsado un programa específico, ‘Repoblem’, que incluye numerosas medidas para mejorar los servicios y las oportunidades de trabajo en las zonas rurales más desfavorecidas. “Lo que le solicitamos a la UE, el Gobierno y la Generalitat, es que que muestren una especial sensibilidad ante esta problemática y doten a los gobiernos provinciales de más recursos y mejor capacidad administrativa para poder actuar de forma eficiente contra la despoblación rural”, ha explicado Vicent Sales, portavoz del Gobierno Provincial y que ha defendido la moción.
Hay que tener en cuenta que Castellón es una provincia singular y sufre especialmente este problema, ya que el 80% de la población reside en el 20% del territorio, en la zona de costa, y solo el 20% de la población vive en el resto del territorio, representado por los pueblos de interior. Además, el 86% de los pueblo tiene menos de 5.000 habitantes y 19 de ellos menos de 100. En uno de cada cuatro pueblos no nace un niño desde hace más de un año. Y 49 municipios tienen una densidad menor a 10 habitantes por kilómetro cuadrado, cifra muy inferior a la media española y valenciana.
Sales ha argumentado que “necesitamos garantizarles dos necesidades básicas: empleo y servicios. El Gobierno Provincial debe seguir con el programa Repoblem, siendo una apuesta a largo plazo que ya está dando sus frutos, permitiendo que decenas de familias se queden a vivir en nuestros pueblos, acercando servicios, igualando oportunidades y fomentando iniciativas emprendedoras que apuestan por el mundo rural”. “No podemos asistir de brazos cruzados mientras envejece la población y se quedan los pueblos vacíos, porque es un drama”.
