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miércoles, 24 de abril de 2024 | Última actualización: 11:18

300 miembros de Cruz Roja participan en un simulacro de emergencias

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Cerca de 300 miembros de Cruz Roja participan desde hoy 31 de marzo y hasta el 3 de abril en GAMMA 2014 “Luñol”, un simulacro de emergencia organizado por la UME. El simulacro reunirá durante cuatro días entorno a la localidad de Buñol a efectivos de distintos organismos y empresas civiles de emergencia para ensayar la respuesta colectiva ante una catástrofe de carácter nacional. La catástrofe, en este caso, será un fuerte seísmo.

Cruz Roja desplegará en la zona medios numerosos medios humanos y técnicos. Los más de 280 efectivos procederán en parte de la Comunitat Valenciana (más de un centenar) pero también de Castilla-La Mancha, Cataluña, Madrid, Murcia, Andalucía, Aragón y Navarra. El despliegue técnico, por su parte, se traduce en la instalación en la zona de dos albergues de interior, un campo de damnificados en el exterior, de tres puestos sanitarios, un puesto médico avanzado y un puesto de atención primaria, un ERIE de búsqueda en medio acuático en orillas de río, 15 ambulancias, así como un centro de recepción de medios, un centro logístico y un Puesto Avanzado de Mando (PMA) que se instala en colaboración con la Conselleria de Gobernación.

El simulacro se centra en una localidad llamada “Luñol”, ubicada a orillas del río del mismo  nombre y 38 kilómetros al oeste de la ciudad de Valencia. Luñol cuenta con 108.000 habitantes y es el centro histórico y artístico de una comarca denominada “la hoya de Luñol”. La comarca abarca 585,2 kilómetros cuadrados e incluye los términos municipales de Alborache, Luñol, Cheste, Chiva, Godelleta, Macastre y Yátova.

Riesgo sísmico

El Plan Especial frente al riesgo sísmico en la Comunitat Valenciana indica que esta zona está situada en un área de sismicidad moderada. Concretamente la zona de Luñol presenta un riesgo de terremoto de intensidad esperada de 7,0 con un periodo de retorno de 500 años. El 31 de marzo, en este sentido, se produce un movimiento sísmico de magnitud 6,3  cuyo epicentro se localiza en las proximidades de Luñol y con una profundidad de 9 kilómetros. La profundidad del epicentro es escasa por lo que la sacudida es más violenta y los daños mayores.

El terremoto causa daños estructurales en un número elevado de edificios, algunos de los cuales se colapsan, quedan seriamente dañadas las infraestructuras (desde carreteras a la red eléctrica o la red ferroviaria) y las primeras informaciones apuntan a que el seísmo ha dejado “cientos” de muertos y heridos, la mayoría de ellos españoles aunque también hay extranjeros entre las víctimas.