Pese al récord de precipitaciones en la provincia, el verano de 2025 ha sido el más cálido jamás registrado en la Comunitat Valenciana, con olas de calor extremas y una preocupante temperatura del mar Balear
El año hidrológico 2024-2025 —que comprende del 1 de octubre de 2024 al 23 de septiembre de 2025— está a punto de concluir con un carácter húmedo en la Comunitat Valenciana, marcado por un superávit pluviométrico medio del 22 % en el conjunto de la región. En total, se han acumulado 611,6 litros por metro cuadrado, cuando lo normal serían 499,7 l/m². Sin embargo, este promedio regional esconde importantes contrastes provinciales, siendo Castellón la protagonista de un comportamiento climático excepcional.
Castellón: el año más lluvioso del siglo junto a 2019-2020
En Castellón, el año hidrológico 2024-2025 se posiciona ya como el más húmedo del siglo XXI, empatando con el ejercicio 2019-2020. La provincia ha registrado un superávit pluviométrico del 39 %, lo que significa que ha llovido un 39 % más de lo habitual. Esta cifra contrasta con el déficit del 13 % en Alicante y el superávit del 28 % en Valencia, aunque en esta última provincia con grandes diferencias entre el litoral y el interior norte.
Este comportamiento responde, en parte, a dos episodios meteorológicos clave:
- El temporal catastrófico de finales de octubre de 2024
- Y el episodio persistente de lluvias en la primera quincena de marzo de 2025
Ambos contribuyeron de forma significativa a este repunte hídrico, aunque también se han registrado episodios tormentosos intensos en los meses de verano que, si bien localizados, dejaron importantes acumulados en algunas comarcas de Castellón.
Un verano extremo: el más cálido desde que hay registros
Pese a las abundantes lluvias en buena parte del año, el verano climático de 2025 (junio, julio y agosto) ha sido el más cálido registrado en la Comunitat Valenciana desde 1950, con una temperatura media de 25,5 ºC, lo que supone 2,2 ºC por encima de lo habitual. Castellón no ha sido la excepción y ha sufrido igualmente los efectos de este calor extremo.
Además, el trimestre veraniego ha mostrado un déficit de precipitación del 7 %, con 55,8 l/m² acumulados frente a los 60,0 l/m² habituales. La mayor parte de las precipitaciones estivales se concentraron en julio, un mes que, aunque normalmente seco, estuvo marcado por tres episodios tormentosos relevantes.
Las tormentas de julio: Castellón bajo granizadas y lluvias intensas
Uno de los episodios más significativos del verano ocurrió el 12 de julio, cuando el paso de una Dana (depresión aislada en niveles altos) provocó tormentas muy adversas en Castellón.
También se produjeron episodios destacados los días 8-9, 23 y 24 de julio, con acumulados notables como los 63,6 l/m² en Catí. Estas tormentas presentaron un carácter más habitual del final del verano, pese a ocurrir en pleno julio.
Temperaturas récords, olas de calor y mar recalentado
El mes de junio de 2025 fue el más cálido desde que hay registros, superando incluso las medias habituales de julio y agosto. Durante el verano se registraron olas de calor prolongadas, con temperaturas que alcanzaron cifras históricas:
- 45,5 ºC en Sumacàrcer (16 de agosto)
- 44,5 ºC en Carcaixent
- 43,7 ºC en Xàtiva
- 44,9 ºC en Orihuela (18 de agosto)
El calor no solo se quedó en tierra firme. El mar Balear, que baña la costa de Castellón, ha sufrido un calentamiento sin precedentes, con una anomalía media de +2,2 ºC durante el verano. El día 2 de julio, la temperatura del mar era 4,6 ºC más alta de lo normal, y el 17 de agosto se alcanzó un máximo estacional de 28,6 ºC en el promedio del mar Balear, según los datos del Servicio de Cambio Climático de Copérnicus.
Septiembre prolonga el calor y las tormentas
Aunque fuera del periodo estrictamente estival, septiembre de 2025 ha mantenido la tónica de temperaturas elevadas, con una media prevista 1,3 ºC por encima de lo habitual. También ha habido tormentas muy localizadas, como la que afectó a la Vega Baja y Xàtivael8 de septiembre, conreventones húmedosy rachas deviento superiores a 100 km/h.
¿Qué se espera para el otoño?
La previsión estacional para el trimestre septiembre-octubre-noviembre de 2025 indica que:
- Hay alta probabilidad de que la temperatura media se sitúe en el tercil cálido, especialmente en el este peninsular, incluyendo Castellón.
- En cuanto a precipitaciones, no se espera una desviación significativa respecto a los valores normales.
Balance climático de un año de contrastes
Castellón ha sido testigo, este 2024-2025, de un doble fenómeno climático:
- Por un lado, uno de los años más húmedos del siglo, que ha permitido recargar acuíferos y refrescar ecosistemas, especialmente tras las intensas lluvias otoñales y primaverales.
- Por otro, el verano más cálido desde 1950, con olas de calor extremas, mar recalentado y condiciones que consolidan una tendencia alarmante al alza en las temperaturas.
Una realidad que, según los expertos, ya no es excepcional, sino la nueva norma climática. El cambio climático avanza con paso firme, y Castellón, como el resto del Mediterráneo, está en primera línea de sus efectos.
