Mercedes Ventura. Diputada autonómica de Ciudadanos por Castellón.
Desgraciadamente en pleno siglo XXI la violencia machista sigue siendo noticia en prensa. En nuestra sociedad aún convivimos con conductas animales, donde ciertas ‘bestias sanguinarias’ son capaces de cualquier barbaridad para demostrar su supuesta superioridad de género. En este pensamiento irracional del hombre subyacen conductas destructivas hacia las mujeres por la enferma creencia de que un género debe dominar sobre otro. Este pensamiento enfermizo de superioridad mata y en lo que llevamos de año, ya han muerto 31 mujeres en manos de estas ‘bestias sanguinarias’.
La violencia de género es una lacra en la Comunitat Valenciana y el año pasado se posicionó como la segunda autonomía con más denuncias por violencia machista, un total de 4.067, según el Registro Central del Ministerio de Justicia. Estos datos indican que dos de cada mil mujeres con una edad superior a los 13 años son víctimas del maltrato físico y/o psicológico de un hombre. Por otro lado, es llamativo ver el aumento de este delito entre los adolescentes, cada vez hay más casos a más temprana edad.
Parece que la sociedad avanza en una dirección contraria, abocada al abismo. Es cierto que la Ley de medidas de protección integral contra la violencia de género de 2004 impulsó diversas para la atención y protección a la víctima, contribuyendo a sensibilizar a la sociedad sobre las diferentes formas de maltrato existente hacia las mujeres gracias a los medios de comunicación, así como ayudar a cómo formular la denuncia, pero aún queda mucho por hacer.
Tal y como indicaba el Síndic de Greuges esta semana en su informe los recursos destinados para atender y proteger a las víctimas del machismo son escasos y existe una falta de coordinación entre los agentes que atienden a la víctima y a sus hijos e hijas.
Desde Ciudadanos estamos colaborando en la elaboración de un dictamen donde se recojan medidas para erradicar la violencia de género y compartimos totalmente la visión del Sindic de Greuges. Entendemos que el primer pilar a trabajar sería en la coeducación, donde se fomenten valores de respeto a la diversidad y se eduque en la igualdad plena de sexos. También sería recomendable desarrollar protocolos de prevención, detección y actuación contra el acoso escolar y micromachismos en las aulas.
Por otro lado, creemos que es importante la formación especializada por parte de los docentes para su detección y actuación, así como de los diferentes agentes que trabajan directamente con la víctima. Otra medida reivindicada sería garantizar la atención y protección a la víctima sin previa denuncia, esta medida garantizaría su protección y evitaría que la víctima volviera con su agresor por no disponer de recursos.
Pero también es vital ampliar el foco a los hijos e hijas expuestos a la violencia de género y que se elabore un protocolo de intervención para estos menores, que oriente y sirva de herramienta de trabajo y dote de recursos para todo el núcleo familiar. Estas y otras medidas han sido solicitadas por nuestro grupo, así como la voluntad política del gobierno de dotar más recursos. Con la aplicación de estas medidas estaremos más cerca de todas las mujeres que han perdido la esperanza de seguir adelante y se queda atrapadas en una película de terror.
