El Castellón trabajó ayer pocas horas después de la victoria contra el Crevillente y de ponerse a tan sólo un punto del líder Atlético Levante. Ahora toca prepararse para el partido del jueves en Castalia, de la ida de la final de la Copa RFEF. Para esa cita hay tres jugadores descartados por sanción, mientras que la enfermería está vacía.
F. F.
El Castellón, que trabajó este lunes y que el martes tendrá jornada de descanso, calienta motores para afrontar el partido de ida de la final de la Copa RFEF, que tendrá lugar este jueves a las 20.30 horas contra el Real Unión Club en el estadio Castalia. Lo hará tras la victoria del domingo contra el Crevillente.
Eso sí, para la cita copera el técnico Ramón María Calderé tendrá tres bajas seguras por estar sancionados. Es el caso del defensa Juanra Cabrero y los delanteros Víctor Pino y Rubén Negredo. Además, los dos jugadores que sufrieron golpes y contusiones el domingo en Castalia, caso de Albert Yagüe y Rubén Suárez, estarán a disposición del técnico.
Para la final sólo quedará la sesión de trabajo del miércoles. Luego se jugará el jueves contra el Real Unión Club, el segundo clasificado del grupo II de Segunda División B y que cuenta con una magnífica plantilla.
Por otra parte, se informó de que el próximo partido de Liga del Castellón será el próximo domingo a partir de las 17.00 horas en el Camilo Cano frente al conjunto alicantino de La Nucía, que es penúltimo en la clasificación.
