Los casos de ocupaciones ilegales se han multiplicado en los últimos años y son muchos los propietarios que han optado por vender sus inmuebles con inquilinos en su interior
Las ocupaciones ilegales de pisos se extienden a lo largo del territorio nacional, una situación que se acrecienta en las capitales de provincia. Los propietarios se encuentran, en la mayoría de ocasiones, indefensos al no poder desalojar a los ‘nuevos’ inquilinos, y los agentes policiales poco pueden hacer para solucionar esta indeseable situación.
Y es que, por ejemplo, en casos de okupaciones en los que en la vivienda se hallan menores de edad, el desalojo se paraliza, tal y como ya explicó en su día a este medio el concejal de Seguridad y Emergencias, Antonio Ortolá. Esto se debe a que el menor en cuestión (así como personas vulnerables) precisa de una especial protección que debe tenerse en cuenta antes de proceder a un desalojo forzoso, por lo que el proceso puede durar años.
“La Policía Local puede hacer muy poco en estos casos. Estas personas están amparadas por la ley y si no quieren marcharse, no les podemos obligar”, explicó hace unos meses el munícipe tras la ocupación de un chalet de medio millón de euros en el Pau Lledó.
Por ello, los propietarios optan por vender sus inmuebles con los okupas en su interior. Estos anuncios, cada vez más frecuentes, reflejan la dificultad de los propietarios para recuperar la posesión de sus pisos y la creciente presencia de este fenómeno en el mercado.
Un conocido portal inmobiliario oferta un total de 16 pisos okupados en venta en la ciudad de Castelló, cuyo precio es significativamente inferior al precio de mercado de viviendas similares libres de okupación. Desde chalets o casas independientes, a pisos cercanos a la avenida del Mar e, incluso, en Sensal, una de las zonas que aglutina un mayor parque inmobiliario y donde no cesa la construcción de nuevas promociones.
Los alrededores del Estadio Castalia, la plaza Donoso Cortés y la Ciudad de Transporte concentran la mayor parte de las viviendas okupadas en venta, cuyos precios oscilan entre los 42.000 y los 50.000 euros.
Mapa de la okupación
El Ayuntamiento de Castelló, en la apuesta del gobierno municipal por frenar las ocupaciones ilegales, ha elaborado un ‘mapa’ para detectar las zonas de la ciudad afectadas por estos casos. Una herramienta que se va actualizando y que sirve a la Policía Local para localizar las zonas en las que existe un mayor volumen de okupación con el objetivo de reforzar la seguridad.














































