La ciudad retoma poco a poco la 'nueva normalidad' con menos personas en las calles
Castellón ha comenzado este lunes la fase 0 de la desescalada del confinamiento con una tímida apertura de peluquerías, pequeños comercios y restaurantes con comida para llevar. Las peluquerías que han abierto lo hacen con cita previa y con unas estrictas medidas de seguridad, al igual que los pequeños comercios que la gran mayoría han puesto carteles en sus escaparates para llamar por teléfono. También los restaurantes han empezado a trabajar para poder llevar la comida a casa
S. Barberá/Castellón Información
Castellón ha registrado una apertura tímida en los pequeños comercios, peluquerías y restaurantes para poder llevar la comida a casa en el primer día de la fase 0 y del inicio de la desescalada del confinamiento por la crisis del coronavirus.
Una de las peluqueras que ha abierto desde hoy sus puertas es Paula Pachés, propietaria de La Pelu de Paula, que tiene su salón en la calle Sant Félix de Castelló. Esta profesional afirma que desde que anunciaron que se podrían abrir las peluquerías desde este lunes ha estado trabajando para conseguir todos los materiales de seguridad como guantes, mascarillas, geles y batas, que son obligatorios y difíciles de conseguir en estos momentos.
Para la jornada de hoy este salón atiende solo a clientes previa cita por teléfono y de momento solo atenderán a una clienta en cada servicio. Una de las quejas que manifiesta esta profesional de la peluquería es que “no es normal que la gente mayor de 65 años solo pueda venir a la peluquería en su horario de salida a la calle porque es imposible, más cuando muchas de nuestras clientas que acuden semanalmente a los salones tienes esas edades”. Por ello explica que “deberían poder dejarles al menos venir por las mañanas a los mayores y por la tarde a los más jóvenes”. Además, también lamenta la falta de información clara que ha habido “de hecho hasta ayer domingo por la tarde no vimos las normas publicadas en el BOE”.
Además, Paula explica que tiene una larga lista de espera para atender después de estos casi dos meses de confinamiento y que poco a poco irán dando citas, pero, como el resto de peluqueras y peluqueros pide paciencia a todas las clientas para poder ser atendidos con las mejores medidas.
De hecho, asegura que “llevo tres días sin dormir por todo el estrés para poder abrir de nuevo y he hablado con otras compañeras y les ha pasado lo mismo”. Y asegura que, aunque se puede abrir desde hoy los salones, muchos lo harán a partir de la semana que viene.
Por otro lado, en cuanto a los restaurantes que han podido abrir para llevar comida a casa se encuentra Bona Vida, situado en la calle Caballeros de Castelló, que ya había abierto desde la semana pasada y su responsable afirma que “hemos llevado comidas y almuerzos a oficinas y a domicilios que nos han solicitado previa llamada telefónica”. Durante la semana pasada los pedidos fueron flojos, explica, aunque “el fin de semana sí que hemos tenido más pedidos especialmente de la carta como el pulpo y sepionet que son una de nuestras especialidades”. Para la semana que viene, cuando ya puedan abrir la terraza, esperan poder tener permiso para instalar algunas mesas en la calle, y así dar servicio a sus clientes. Además, cuentan con otro local en la misma calle que sí que dispone de mesas en la calle y allí seguro que podrán atenderles.
Los pequeños comercios eran otro de los beneficiados en esta fase 0 de la desescalada. Algunos, no muchos, han abierto y tenían en el escaparate un cartel para que se pudiera llamar por teléfono y así realizar su pedido para recogerlo posteriormente.
Colas en las oficinas bancarias y en Correos
Pero donde más colas se han formado esta mañana de lunes era en los bancos. Numerosas personas aguardaban colas en la Avenida del Rey don Jaime, en la Puerta del Sol y en prácticamente todas las oficinas bancarias que estaban abiertas ya que la entrada a estas está limitada por número. Y también se han visto largas colas en la sede de Correos de la calle Zaragoza.
De otro los puestos del Mercado Central de Castelló han registrado también actividad como en los pasados días aunque no de una forma masiva. Había poca gente para realizar las compras en los puestos de venta.
De otro lado, las calles de Castelló no han estado muy concurridas por personas durante la mañana del lunes dejando algunas imágenes inéditas, como ya viene siendo habitual desde el pasado 14 de marzo, día en el que se decretó el estado de alarma en España por las crisis del coronavirus.
