Mulet recuerda que se trata de "una herencia envenenada" del ejecutivo de Zapatero
Castellón Información
El portavoz de Compromís en el Senado, Carles Mulet, pide que el Estado anule los convenios de las desaladoras de Cabanes y Moncofa con los ayuntamientos de Cabanes, Orpesa, Benicàssim, Moncofa y Xilxes, y asuma el canon de construcción, y la gestión directa de las mismas.
Mulet ha recordado que la coalición mantiene en la cámara alta una serie de enmiendas a los presupuestos generales del Estado de 2018 en los cuales se exige una serie de medidas para buscar una solución al problema de las desaladoras en el País Valencià "estos proyectos faraónicos, a medio gas en las comarcas de Alacant, destinados para la especulación pura y dura en las de Castelló, nacieron con el Gobierno de Zapatero, que dejó este caramelo envenenado, mientras los gobiernos de Rajoy se dedicaron a dejar pasar el tiempo sin tomar ninguna medida para solucionar el desastre. Ahora el nuevo ministerio de Transición Ecológica ha de actuar con urgencia, ya que la situación es dramática"
Mulet afirma que las desaladoras de Cabanes y Moncofa "nacieron para hacer posible grandes proyectos urbanísticos en estas dos áreas, proyectos ahora anulados o descartados, no existe ninguna demanda considerable, y son inasumibles para los actuales ayuntamientos; las obras están terminadas, y Europa reclama recuperar parte de la inversión hecha. Ha de ser el ministerio, con capacidad económica suficiente, quien busque usos alternativos y más amplios, y no ahogar a estos pequeños ayuntamientos. La predecesora de Teresa Ribero, Cristina Narbona, fue quien se plegó a las presiones de los grandes grupos de la construcción como Marina d'Or haciendo unas desaladoras a su medida, y por ello esperamos que la nueva ministra sea parte activa en la solución de este desaguisado"
