Miguel Angel Mulet y Alfonso Bataller: “nos ha tocado bailar con la más fea”
El último pleno del Ayuntamiento ha discurrido sin pena ni gloria, sin debate, sin despacho extraordinario y solo se ‘ha soltado el pelo’ en el apartado de ruegos y preguntas, que muchos concejales aprovecharon para despedirse. En general, agradecimiento a los funcionarios, a los compañeros de Corporación, deseos de buena suerte, y algún que otro mensaje como el de Inmaculada Enguídanos, de agradecimiento a Juan María Calles; o el reconocimiento de Miguel Angel Mulet a Carlos Fabra, José Luís Gimeno y Pepe Falomir. Al final, han coincidido tanto Mulet como Alfonso Bataller: “nos ha tocado bailar con la más fea”. “Pero lo importante, por encima de las siglas, son los ciudadanos de Castellón”.
Esperanza Molina/Castellón Información
Era un pleno de trámite, el último de mes de mayo, pero también el último de la legislatura.
Mucho público, pero esta vez sin pancartas ni camisetas reivindicativas. Concejales electos y miembros de los partidos que han tenido el respaldo de los votantes para integrar la corporación en la nueva legislatura. Y enorme presencia de los medios de comunicación.
Cualquier que no hubiera seguido estos cuatro años, hubiera pensado, tras la sesión de hoy, que todo han sido abrazos y besos durante esta legislatura. ‘el club de los hombres y mujeres buenos’.
Pero hoy no tocaba debate, acusaciones, ni sátiras. Tocaba decir adiós.
Un tercio de la Corporación no repetirá. Unos porque ni siquiera estaban en las listas electorales de sus partidos; otros, por no haber obtenido los votos suficientes para ello.
En poco más de diez minutos se liquidó el contenido del despacho ordinario. Sin un debate, ni una intervención. Unas veces por unanimidad y otras por mayoría.
No hubo despacho extraordinario. Pero el turno de Ruegos y Preguntas fue aprovechado para las despedidas.
La primera en hacerlo fue Carmen Carreras, que tras ironizar con que “se la iba a echar de menos”, manifestó que estaba satisfecha con la gestión realizada por su grupo durante estos cuatro años y por haber contribuido al cambio en el Ayuntamiento. Y tras agradecer su trabajo a los funcionarios y a los políticos, dijo: “ha sido un privilegio poder trabajar por la ciudad”.
Posteriormente fue el turno de los concejales socialistas: Juli Domingo se despidió “después de 20 años” en el Consistorio de la Plana, pero la vida son periodos y hay que saber cuándo se acaban. “Bona sort a todos los que van a gestionar el Ayuntamiento y bona sort al poble de Castelló por su coraje y su valentía”.
Salió entonces Inma Enguídanos, concejal socialista que tampoco repetirá. La situación de Enguídanos dentro de su grupo no ha sido fácil por su cercanía con Juan María Calles y los problemas que se han suscitado estos años entre Calles y Amparo Marco.
De una forma tan elegante a como ha sabido llevar estos años, Inmaculada Enguídanos, agradeció a Juan María Calles la oportunidad que le dio para estar en política, porque “eso me ha permitido aprender y conocer a gente que nunca hubiera pensado que iba a conocer”. Mientras Enguídanos pronunciaba estas palabras, Calles sonreía y Amparo Marco daba un salto en el asiento.
Juan Antonio Morales también dijo adiós, con el deseo de que los próximos sigan trabajando en defensa de los intereses de Castellón.
Javier Peris anunció “devuelvo mi sillón al Ayuntamiento, que me había sido prestado por los vecinos”, y mostró su agradecimiento al PSOE, Los funcionarios y concejales del PP “que han aguantado mi trabajo”.
Por último Pep Grao, emocionado, pidió a los nuevos gobernantes que no descuiden la educación, que es la mayor apuesta por la igualdad de oportunidades.
Entonces llegó el turno del PP.
Marta Gallén, todavía teniente alcalde del Grao, indicó que han sido doce años apasionantes en el Ayuntamiento. Agradeció el trabajo de los funcionarios y el asesoramiento que ha recibido de ellos, y pidió disculpas por si en algún momento no había estado a la altura de lo que se exigía de ella. Finalmente dijo haber estado muy a gusto, en un equipo cohesionado y trabajando por Castellón.
Miguel Angel Mulet, el concejal que, con Marisa Ribes, más años ha pasado como miembro de la Corporación Municipal, pidió permiso para leer su despedida, que llevaba escrita.
Visiblemente emocionado, Mulet señaló que había tenido el honor de trabajar con tres alcaldes: José Luís Gimeno, que consolidó la transformación de la ciudad, sin desmerecer a alcaldes anteriores. Alberto Fabra, que supo contagiarle la pasión por Castellón y el orgullo de capitalidad… “y con Alfonso Bataller… Alfonso, nos ha tocado bailar con la más fea”.
Indicó que, menos el área de personal, ha ejercido su cargo en casi todas las áreas “he servido igual para un roto que un descosido”… aunque ha reconocido que donde más ha disfrutado ha sido la de cultura y fiestas.
A medida que hablaba Mulet no podía esconder los sollozos. Pero Aún sí sacó adelante un discurso en el que tuvo palabras de agradecimiento para sus ‘maestros’, entre los que no eludió a Carlos Fabra, José Luís Gimeno y Pepe Falomir. Dedicó un efusivo elogio a los compañeros que lo han acompañado, con mención especial para Marisa Ribes; pero también para concejales de todos los partidos, como el socialista Alfredo Cadroy, Carmen Lorenz… y otros durante estos años; a los funcionarios; y a los medios de comunicación.
En lo que concierne a los agradecimientos, el más especial fue para su mujer.
Roto por el llanto y arropado por el aplauso de los concejales de todos los partidos, Mulet pidió perdón si no ha llegado a cumplir todo lo que le exigieron los ciudadanos, y enunció su ruego al alcalde: “Ruego a las personas que integren la nueva Corporación que mantengan el espíritu democrático y constructivo que él ha tenido el lujo de poder disfrutar en las sucesivas corporaciones, con el orgullo de ser de Castellón.
El alcalde en funciones, Alfonso Bataller cerró la sesión con palabras de agradecimiento para los funcionarios, que son los marineros de este buque, y por el trabajo que realizan para todos los castellonenses. “Estos últimos cuatro años, dijo, como ya ha citado Mulet, nos ha tocado bailar con la más fea”, lo que ha supuesto hacer un trabajo difícil en una época muy dura.
Agradeció el trabajo de su equipo y el de la oposición por la posibilidad de haber podido consensuar acuerdos positivos para la ciudad; y a los medios de comunicación por haber sabido transmitir su trabajo. Finalmente, indicó “Castellón está por encima de los partidos y las siglas y los ciudadanos se merecen que el Ayuntamiento anteponga los intereses de Castellón por encima de todo lo demás”.
Terminada la sesión, abrazos, palmadas en la espalda, besos, felicitaciones… sonrisas entusiasmadas por parte de concejales del PSOE o Compromís que repetirán; y muchas, muchas lágrimas de los que van a cambiar de rumbo.
Ahora llegan las negociaciones, los pactos y los acuerdos.
En ese final, los periodistas también se hicieron su fotografía de grupo en el salón de plenos.
