El edificio fue comprado en el 2003 para su demolición y construcción de oficinas municipales
El Grupo Municipal Socialista ha desempolvado los papeles relativos al edificio del Asilo Municipal, que permanece abandonado desde el 2007. Los socialistas recriminan a Bataller la gestión que inició José Luís Gimeno, y paralizó Alberto Fabra cuando se acabó el dinero para demoler y construir nuevas oficinas municipales.
En diciembre del 2003 el pleno del Ayuntamiento de Castellón aprobó en pleno la compra del edificio y Solar del Asilo a las Monjas de los Desamparados.
Según se comentó entonces, el edificio se encontraba en muy mal estado, las reparaciones superaban todos los presupuestos de conservación, y suponía un peligro tanto para las monjas como para la labor social que se desarrollaba allí. Por otra parte, el solar, en pleno centro de Castellón, tenía una ubicación estratégica y de alto valor para el Ayuntamiento de la ciudad. El antiguo edificio se había quedado pequeño hacía décadas, y el nuevo edificio tampoco tenía espacio para más.
El acuerdo de pleno consistía tanto en dinero, como en proporcionar a las monjas un nuevo espacio donde ubicar un nuevo asilo, donde continuar su acción social. Después de muchas negociaciones, con José Luís Gimeno, como alcalde de Castellón, se cerró un acuerdo cuyo montante ascendía a 16,8 millones de pesetas (de entonces), que serán abonadas en 6 anualidades. Con este dinero se adquiría un solar en las inmediaciones de la Basílica de Lledó y se construía un nuevo edificio para las monjas y el Asilo. El mismo acuerdo condicionaba al Ayuntamiento que no podría ocupar este terreno hasta el 2007 cuando se hubiera efectuado el traslado del asilo y las monjas. Aquel acuerdo fue recurrido por el Grupo municipal socialista.
Desde entonces y hasta ahora, el elemento más significativo que cambia la historia y las previsiones, se llama dinero. Si en el 2003 era una solución óptima y de futuro para el Ayuntamiento, cuando se fueron las monjas, en el 2007, el Ayuntamiento echó cuentas y no le salieron los números. Alberto Fabra, entonces alcalde de Castellón, calculó que solo la demolición del edificio podría supera los 100.000 euros. Tampoco se planteó ocuparlo, provisionalmente, porque según se indicó entonces, el estado del edificio no garantizaba la seguridad de las personas, y la rehabilitación del mismo podría ser más costosa que su demolición y construcción de un inmueble de nueva planta.
El Grupo Socialista ha desempolvado los papeles del Asilo l, y según un informe técnico, fechado en el 2013, y que se les ha entregado esta mañana, el edificio no tiene aluminosis. ¡Ojo!, El inmueble, según dicen no tiene aluminosis pero tampoco tiene condiciones de habitabilidad. Porque según indica el grupo socialista en su comunicado: “El informe técnico destaca que el edificio no se encuentra en condiciones de habitabilidad para ser utilizado. Las instalaciones de servicios (electricidad, agua, servicios sanitarios) son “inadecuadas” y se afirma que “para su utilización se precisaría de una inversión económica considerable, puesto que tanto la carpintería (puertas, ventanas, vidrios...), pavimentos, aseos, instalaciones, etc., necesitan de su sustitución y reparación”. También se especifica que es necesario un estudio de cargas que garantice la seguridad de la estructura del edificio.”.
¿Se podía haber rehabilitado a más bajo precio cuando se desalojó en el 2007?. El Grupo Socialista no se lo plantea, pero acusa al alcalde Bataller de repetir la misma afirmación y datos que le dejaron por escrito, ya través de los medios de comunicación los dos alcaldes, de su mismo partido que le precedieron, y que gestionaron la compra y el desalojo del Asilo.- EM.
